• A pesar de sus negligencias el alcalde comundeño Walter Valenzuela ya busca ser candidato a diputado federal por Morena • Para nadie será sorpresa cuando la estupidez y negligencia de Valenzuela Acosta le reboten en la cara tal como le puede pasar a muchos soberbios y engreídos representantes de Morena • El presidente de Comondú no se da cuenta que es necesario cambiar la forma de hacer las cosas, porque hasta ahora no ha podido dar en el clavo, sus ocurrencias no permean en mejorar la percepción ciudadana sobre su gestión
Uno de los problemas más
fuertes que tiene Morena en la entidad es la forma incongruente y deshonesta
con que realizan su trabajo algunos representantes populares emanados de sus
filas, lo que se conjuga con un primer año del gobierno federal que tiene más
deudas con la población que hechos concretos para cumplir y atender
ofrecimientos hechos en la campaña proselitista del pasado 2018.
A doce meses de un atropellado
gobierno federal encabezado por Andrés Manuel López Obrador, en la entidad
también hay serios problemas de incongruencia y carencia de seriedad
administrativa en morenistas como el alcalde de Comondú Walter Valenzuela
Acosta que no ha podido hacer despegar al ayuntamiento que encabeza.
Con su pobre y limitada forma
de gobernar que a poco a más de un año, ha generado ya en los comundeños la
sensación de haberse equivocado al votar por un munícipe que por más que
insiste le resulta muy difícil maquillar su incapacidad.
El alcalde no puede y no
puede...
El uso inadecuado de dinero
público con la contratación de personas de manera irregular, la escasa
capacidad de respuesta para los servicios públicos básicos, sumado incluso a la
intolerancia hacia los representantes de algunos medios de comunicación,
incrementan la crisis por la que ya atraviesan los comundeños.
Abandonados por la
administración federal que representa en la entidad Víctor Castro, así como por
una labor municipal pobre e indiferente, ha cambiado poco a poco el sentir de
los comundeños que pasó de una actitud esperanzadora a una de evidente
decepción.
Está claro que Walter
Valenzuela parece no darse cuenta que es necesario cambiar la forma de hacer
las cosas, pero hasta ahora no ha podido dar en el clavo, pues sus ocurrencias
no permean en lograr una mejor administración de los recursos municipales y
menos aún en mejorar la percepción ciudadana sobre su gestión.
Obviamente en las pretensiones
del comundeño se encuentran las de disputar al interior de su partido la posibilidad
de ser candidato a diputado federal, solo que para lograr tal objetivo primero tendrá
que superar la serie de rezagos en que ya se encuentran las comunidades del
municipio de Comondú, pero además el superar la actitud altanera de un
presidente municipal que supone que el éxito político y administrativo le
llegará en automático.
Obviamente la falta de
experiencia y pericia política han llevado al municipio de Comondú a una
condición lamentable por lo que no le extrañe a usted amable lector, que en su
momento se tengan que realizar investigaciones por presunta corrupción en un
ayuntamiento morenista precisamente como una de las grandes contradicciones en
las que caen flamantes representantes de la mal llamada 4T.
Lejos parecen quedar cada día
que pasa, las calles limpias y alumbradas de Cd. Constitución e Insurgentes
para dar paso a la prepotencia y al nepotismo evidente en el equipo del incapaz
alcalde Valenzuela Acosta.
Basta revisar la nómina del
ayuntamiento y de sus subdelegaciones y delegaciones municipales donde los
recomendados están a la orden del día.
Con estas condiciones será muy
difícil para Morena y para el propio Walter Valenzuela volver a convencer a una
comunidad que ya evidencia el arrepentimiento de elegir a un alcalde que no ha
dado el ancho y que difícilmente podrá repuntar en lo que resta de su
administración.
Perfilado ya para buscar una
candidatura morenista Walter Valenzuela no quiere ver que tratar de ser
candidato para el proceso del 2021 por una diputación federal o cualquier otro
puesto de elección popular, puede ser calificado por los comundeños como una
burla pues aún esperan que el alcalde cumpla cabalmente con su responsabilidad.
Está claro que no es casual
que la estrechez política y administrativa de Valenzuela Acosta coincida con la
cerrazón evidente del superdelegado Víctor Castro que a su vez hace extensivas
las pifias y mentiras del gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador que
apenas este domingo cumplió su primer año de gobierno, uno de los más
accidentados del país en los últimos tiempos.
Por supuesto para nadie será
sorpresa cuando la estupidez y negligencia de Walter Valenzuela le reboten en
la cara tal como le puede pasar a muchos soberbios y engreídos representantes
de Morena.
¿No le parece así amable
lector?