El fundador de la Asociación Ganadera de Los Dolores asegura que el sector no fue consultado para elaborar dicha ley
La Paz, Baja California Sur.- Uno de los fundadores de la Asociación Ganadera de Los Dolores, Raúl Carballo Cota, criticó la promulgación de la Ley para Prevenir y Eliminar la Presencia de Ganado en Vías de Comunicación Terrestre, pues asegura que fue hecha “al vapor”, toda vez que el sector al que pertenece no fue consultado para elaborarla.
“No se pueden hacer leyes al vapor, sin conocer el contenido de lo que es realmente el ganado en la carretera”, comentó Raúl Carballo, quien aclaró que los ganaderos no están “en contra de que se haga una ley”, pero ésta debe ser “una ley donde se tome en cuenta al sector ganadero, que se tome en cuenta a Comunicaciones y Transportes, a la Unión Ganadera, para que en una asamblea se dé a conocer la inconformidad o no de la ley que se va a emitir”.
“Es una ley al vapor, porque el primero que tiene que estar enterado y poner sus puntos de vista es el ranchero, el ganadero, el que va a ser afectado […] Si nos sujetamos a una ley que está siendo propuesta por un diputado, o por no sé quién, pues siento que no está bien, que no reúne los requisitos para emitir una ley de esa naturaleza”, comentó el ganadero.
En este sentido, Raúl Carballo recordó que “antes de que hubiera carretera, ya era ganadero aquí”, al referirse a la zona de La Paz, y aseveró que “hoy hay más accidentes en las carreteras que antes, cuando había más ganado”, ya que “ahora hay más velocidad en la carretera” y “no hay avisos que digan que es zona ganadera”. De acuerdo a sus estimaciones, “más o menos del kilómetro 28 al kilómetro 100 de la carreta al norte”, hace apenas unos años “había como unas 8 mil cabezas de ganado”. Pero “ahorita, en la actualidad, puede que no llegue ni a 2 mil en ese trayecto”.
Los rancheros, dijo el fundador de la Asociación Ganadera de Los Dolores, por un tiempo se encargaron de cercar tramos y darle mantenimiento al cercado, usando alambre y postes otorgado por el Gobierno del Estado, pero “no se toma en cuenta el huachicoleo que hay en la carretera”, lamentó, “se roban los postes, se roban el alambre, se roban hasta los tubos para detener el ganado”. Esto provoca, mostró, que “queden tramos sin cercar”, lo cual es un doble riesgo para el automovilista “porque el ganado se mete por ahí y queda encorralado entre la carretera y el cerco”. Es así que, “si se va a hacer un cerco, hay que cercarlo todo, que no queden pedazos inconclusos”, opinó.
De acuerdo con datos ofrecidos por el Congreso del Estado, en 10 años se han registrado 141 accidentes en carreteras de Baja California Sur (BCS) provocados por ganado. Con la Ley para Prevenir y Eliminar la Presencia de Ganado en Vías de Comunicación Terrestre se crea el Consejo Estatal para la Prevención y Eliminación de la Presencia de Ganado en Vías de Comunicación Terrestre, que será presidido por el titular de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), Daniel de la Rosa Anaya, como órgano encargado de diseñar y coordinar acciones para reducir accidentes en carreteras.
En el año 2009 se reportaron 19 accidentes en carreteras a causa de semovientes; en 2010 el reporte fue de 23; en 2011 la cifra llegó a 19; en 2012 se reportaron también 19; para el año 2013 el dato fue de 17 incidentes; en 2014 el reporte fue de 11; en 2015 se registraron 6 accidentes; en 2016 la cifra fue de 6; en 2017 fue de 8; en 2018 se registraron 4; y hasta junio de 2019 la cifra era de 9.
El Consejo Estatal para la Prevención y Eliminación de la Presencia de Ganado en Vías de Comunicación Terrestre deberá realizar estudios de los ordenamientos jurídicos y administrativos vigentes para proponer las modificaciones necesarias para acabar con accidentes carreteros provocados por semovientes; promover la realización de operativos utilizando todos los recursos que se encuentren en la esfera de su competencia; intensificar campañas para crear la cultura de reportar el ganado a las instituciones que puedan actuar a través de número telefónico 911; promover la adquisición de remolques tipo jaula para trasladar los semovientes que se recojan en vías de comunicación terrestres.