• La Cámara de Diputados declaró reformada la Constitución al aprobarse este ordenamiento en 17 congresos estatales
Ciudad
de México
La revocación de mandato y la consulta
popular quedaron inscritas en la ley este jueves, cuando el pleno de la Cámara
de Diputados declaró reformada la Constitución al confirmarse la aprobación de
éste ordenamiento, en 17 congresos estatales
La presidenta en turno de la Mesa Directiva,
Dolores Padierna Luna, enunció ante el pleno cameral, que una vez realizado el
cómputo de los votos aprobatorios de la mayoría de los congresos de los estados
y de la Ciudad de México (17 como márgen), la Cámara de Diputados emite el
siguiente proyecto de declaratoria:
“El Congreso General de los Estados Unidos
Mexicanos, en uso de la facultad que le confiere el artículo 135
constitucional, y previa aprobación de la mayoría de las honorables
legislaturas de los estados y de la Ciudad de México, declara reformadas y
adicionadas diversas disposiciones de la Constitución Política, en materia de
Consulta Popular y Revocación de Mandato. Pasa al Senado de la República para
sus efectos constitucionales”.
Los 17 votos aprobatorios, corresponden a las
legislaturas de Campeche, Chiapas, Ciudad de México, Colima, Durango, Guerrero,
Hidalgo, Jalisco, México, Michoacán, Morelos, Nayarit, Puebla, San Luis Potosí,
Sinaloa, Tabasco y Tlaxcala. Un voto contra fue el presentado por el congreso
de Guanajuato.
En el pleno cameral se sucedió una catarsis
variopinta en torno a la reforma constitucional. María del Carmen Bautista
(Morena) consideró que la consulta popular es una herramienta de la democracia
directa que empodera a las y los ciudadanos.
No obstante, el panista Raúl Gracia, conocido
por sus agrias criticas al gobierno federal llevo al extremo su razonamiento:
la declaratoria de la reforma constitucional, “es mucho más grave y peligroso
de lo que era hace unos meses, ya que han tomado el control de la Corte y van
por el del órgano electoral. No a la revocación como un instrumento del
socialismo para aferrarse a un poder dictatorial”.
En el terreno de la moderación, la priísta
Dulce María Sauri, consideró la reforma como un avance en materia de
participación ciudadana directa; sin embargo, preocupan las limitaciones,
ambigüedades e indefiniciones que persisten. En 2021, dijo, el INE no sólo será
el encargado de las elecciones federales sino podrá recibir la petición para
revocar el mandato al Presidente, pero “¿cómo lo hará si se le recortó el
presupuesto?”.
También, Martha Tagle ponderó el avance que
representa la reforma constitucional: “con esta reforma la ciudadanía tiene la
llave para activar mecanismos de participación e incidir en las principales
decisiones de nuestro país, así como para quitar a los malos gobernantes.”