En Los Cabos discurso pobre de una alcaldesa rica en el primer informe de Armida Castro A este paso, los cabeños terminarán por entender que tienen como autoridad municipal a una alcaldesa plagada de negligencias, cuya ceguera y sordera política cada vez quedan más en evidencia El Gobernador Carlos Mendoza resaltó las obras de su gobierno
“En Baja California Sur trabajaremos hasta el último día de nuestra responsabilidad para que sigan sucediendo cosas buenas y que los beneficios del desarrollo se reflejen en beneficios para todos”, señaló el gobernador Carlos Mendoza Davis luego acudir al primer informe de actividades de la alcaldesa de Los Cabos, Armida Castro Guzmán, quien por su parte, una vez más mostró sus limitaciones políticas.
En el evidente y burdo afán de la alcaldesa de tratar de marcar distancia política del ejecutivo estatal fue evidente su intento de minimizar los innegables apoyos otorgados por la administración estatal a un ayuntamiento que a pesar de contar con enormes recursos propios, recibe sin menoscabo, el apoyo de la obra pública estatal.
Pero como era de esperarse con sus nada refinadas formas de hacer política Armida Castro intentó claramente quedar bien con el exalcalde Luis Armando Díaz y con el exgobernador Narciso Agúndez, quienes se han caracterizado por apoyar justamente al gremio de taxistas que se oponen a la aplicación de una nueva ley de movilidad estatal.
Con el ya conocido pobre discurso de una alcaldesa rica, los cabeños tienen que digerir a una presidenta municipal que de no ser por uno o dos cercanos colaboradores estaría prácticamente en un grave estado de indefensión política.
Por supuesto que los intereses de los Agúndez Montaño están más que mejor representados en una Armida Castro que cada día se muestra más patética que al igual que los alcaldes de La Paz y Comondú, le suman a la mala imagen de su descreditado partido Morena que parece estar ya recorriendo la senda de una futura derrota electoral.
Mientras que Armida Castro se desvivió en reconocer los apoyos del accidentado gobierno federal que encabeza el cada vez más cuestionado presidente Andrés Manuel López Obrador, se le olvidó reconocer que hasta ahora el gobierno estatal ha pavimentado 51 calles, rehabilitado siete parques y unidades deportivas, las emblemáticas plazas Mijares y Amelia Wilkes, además de haber construido 200 aulas, y rehabilitado 87 escuelas.
Incluso el mandatario estatal le recordó que este año, con la suma de voluntades, se entregaron 110 mil vales de uniformes y útiles escolares, en apoyo a la economía de las familias cabeñas y tres ambulancias completamente equipadas. Además con el apoyo del gobierno federal se construyó el Centro de Atención y Protección al Turista, el primero en operar en el Estado, entre otras acciones importantes en Los Cabos.
Incluso en este primer informe de la alcaldesa, el mandatario estatal destacó la relevancia de la aplicación del Aprovechamiento al Visitante Extranjero, un hecho relevante porque significa que este logro alcanzado por todos, permitirá que a partir del próximo año, se capten aproximadamente 490 millones de pesos para la ejecución de obra pública, para fortalecer la seguridad, el deporte, la educación y el desarrollo rural en los cinco municipios.
“una buena noticia para las y los cabeños y para todos los sudcalifornianos”, puntualizó Carlos Mendoza aunque esto no parece llamarle la atención a Armida Castro que por lo que se ve sigue empeñada en suponer que lo que ha hecho hasta ahora le permitirá competir por la candidatura de su partido a la gubernatura.
Así que una vez más la presidenta municipal de Los Cabos, Armida Castro Guzmán, volvió a demostrar que es todo un riesgo de imagen y discursos políticos que lejos de ayudarle dejan en evidencias sus preocupantes limitantes y las burdas actitudes que dejan al descubierto su ínfimo nivel.
Seguramente los que saben un poco más que la alcaldesa, de lo que es políticamente correcto e incorrecto al ponerse en el escaparate político estatal, como es el caso de la presentación de un infirme de labores, seguramente están ahora más preocupados que antes.
La alcaldesa cabeña parece no entender que su visceral e inmadura forma de asumir sus posturas políticas lejos de agrandar su proyecto se convierten en poderos lastres que no solo afectarán a ella en sí misma, sino al partido al que pertenece que es Morena.
Armida Castro lo volvió hacer.
Así que a este paso, los cabeños terminarán por entender que tienen como autoridad municipal a una alcaldesa plagada de negligencias, cuya ceguera y sordera política cada vez quedan más en evidencia.
Ni cómo negarlo.