• México debe alejarse de un enfoque militarizado de las fuerzas del orden, avanzar en el proceso de formación de la GN como institución civil, instó la ONU-DH
Ciudad de México. - México debe alejarse de un enfoque
militarizado de las fuerzas del orden, avanzar en el proceso de formación de la
Guardia Nacional (GN) como institución civil, resolver el caso de los 43
estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos, así como garantizar la reparación del
daño a las víctimas de la guerra sucia, instó el Comité de Derechos
Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU-DH).
El comité culminó la sexta evaluación periódica de México y entre los
aspectos más preocupantes señaló la nueva política migratoria y las recurrentes
denuncias de violaciones sufridas por personas en situación irregular.
Reportó que en la nueva política migratoria se recurre al uso
generalizado de la detención y, muchas veces, al uso de la fuerza por agentes
estatales.
También se dijo preocupado por la implementación de los Protocolos de
Protección de Migrantes, que obligan a que los solicitantes de asilo en Estados
Unidos permanezcan en territorio mexicano durante su periodo de trámite, y esto
los expone a diferentes violaciones, incluyendo casos de secuestros y
extorsión.
A ONU-DH le preocupan las altas y crecientes tasas de homicidios, los
reportes sobre ejecuciones extrajudiciales y los índices de letalidad que se
registran en el país.
Si bien valora lo expresado por la delegación mexicana acerca de que la
GN es definida constitucionalmente como una institución de carácter civil,
expresó su preocupación por el carácter militarizado de las fuerzas de
orden en general, incluyendo la nuerva corporación, y por la falta de un
calendario claro sobre el retiro de la fuerza militar en las tareas de
seguridad pública.
Hizo un llamado urgente al Estado a redoblar esfuerzos para que se
investiguen todos los crímenes violentos y otros delitos graves de manera
pronta, exhaustiva e imparcial, incluyendo la desaparición de los 43
estudiantes de Ayotzinapa en septiembre de 2014.
El gobierno de México debe intensificar las acciones de reconocimiento
de responsabilidad, conocimiento de la verdad, búsqueda de las personas
desaparecidas, generación y conservación de la memoria y reparación integral de
las víctimas de los delitos cometidos durante la llamada guerra
sucia.
Este órgano de expertos independientes lamentó “el alto nivel de
violencia –incluida la letal– e intimidación en contra de defensores de
derechos humanos y periodistas”.
En este último punto, pidió fortalecer el Mecanismo de Protección para
Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas y sus unidades estatales,
con la asignación de recursos financieros y personal adecuados para su labor.
El próximo diálogo entre el comité y el Estado tendrá lugar en 2027 en
Ginebra, aunque en 2025 será enviada la lista de cuestiones previa a la
presentación de informes.
No obstante lo anterior, en dos años, es decir en 2021, México deberá
rendir cuentas sobre tres puntos: derecho a la vida y la seguridad personal,
impunidad, así como libertades de expresión y asociación.
Lo anterior incluye informar si se han cumplido las recomendaciones
señaladas anteriormente.