• El país necesita estrategia para reducir la violencia contra las mujeres, de los contrario no será posible la construcción de la paz
Ciudad de México. En la actualidad los feminicidios se
concentran en el 10 por ciento de los municipios del país y en 100 de ellos la
violencia extrema contra ellas alcanza niveles alarmantes, dijo Nadine Flora
Gasman Zylbermann, titular de Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres).
Durante la firma del Memorando de
entendimiento entre la ONU y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana
(SSPC), para la Igualdad de Género y Empoderamiento de las Mujeres, lamentó que
esta realidad afecta a este sector de la población, pero también rompe el
tejido social y propicia la impunidad.
"México por tanto, no necesita únicamente de estrategias antidrogas,
estrategias de seguridad o estrategias para reducir la violencia. México
necesita construir la paz, y la contribución de las mujeres es
imprescindible".
Indicó que de acuerdo con el Índice Global de Paz, México lleva más de una
década ubicado entre los países menos pacíficos del planeta, a pesar de no
estar formalmente envuelto en una guerra o conflicto armado como otros países.
"Sin embargo, la vorágine de violencia
entre muertes, desapariciones y violaciones son el panorama asfixiante de una
violencia extrema que no puede ser denominada tiempo de paz.
El narcotráfico y el crimen organizado es un
cáncer que se esparce en vastos espacios comunitarios, con gravísimas
consecuencias para las mujeres y las niñas: se incrementa la violencia sexual,
las desapariciones forzadas, la violencia feminicida y el feminicidio".
Al respecto expresó que el país por tanto, no
necesita únicamente de estrategias antidrogas, estrategias de seguridad o para
reducir la violencia. "México necesita construir la paz, y la contribución
de las mujeres es imprescindible. La importancia de su participación en los
procesos de paz es, ante todo, una cuestión de justicia.
Las mujeres representamos más de la mitad de
la población mexicana, por lo tanto, no podemos hacer frente a problemas
estructurales sin contar con nuestra participación. La clave está en escuchar
su perspectiva, atenderla e incorporarla al diálogo.
"Hoy nos encontramos para conmemorar el
Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Nos
reunimos para decir “basta de las violencias contra las mujeres y las niñas”,
“basta de seguir tolerando que a las mujeres y niñas sigan siendo abusadas,
maltratadas o agredidas”. Pero también, nos reunimos para decirles a las mujeres
y niñas de nuestro país que no están solas, para poner fin a estas violencias y
hacerlo con acciones".
Agregó que la incorporación de una perspectiva de género a la concepción de paz
integral resulta indispensable para poder comprender las estructuras que
violentan y perjudican el avance de la igualdad, a fin de contribuir a la
construcción de estructuras diferentes.