Aunque este año se dieron avances importantes, como la instalación de la Comisión de Búsqueda de BCS, la lucha no termina hasta que los desaparecidos estén de regreso en sus hogares, indican familiares
La Paz, Baja California Sur.- La organización ciudadana ha sido el pilar que ha mantenido la lucha y la búsqueda de las personas desaparecidas en Baja California Sur (BCS). Los familiares de las víctimas encontraron un esquema para afrontar la indiferencia institucional y el dolor de la pérdida de un ser querido que ha dado frutos en el último año en la entidad.
Si bien es cierto que hay avances importantes para resolver las desapariciones en la media península, este tema se convirtió en el 2019 en el principal pendiente en materia de seguridad para las autoridades correspondientes.
Más de 150 desaparecidos ha contabilizado la asociación Búsqueda x La Paz, la mayoría de los cuerpos aún no han sido localizados por las autoridades.
La indiferencia institucional y el nulo avance en carpetas de investigación, según denuncian familiares de las víctimas, obligaron a los ciudadanos a organizarse en asociaciones. Tomaron picos y palas y salieron a explorar BCS en búsqueda de sus seres queridos.
Entre el cansancio y la deshidratación por el sol que cala sin compasión en nuestra tierra, la esperanza de por lo menos dar el último adiós a sus familiares ha mantenido en pie a estos ciudadanos.
Luisa Ávila de la Toba es una de las mujeres que ha salido en estas expediciones en búsqueda de su hijo. El 22 de mayo de este año, la ciudadana originaria de Bahía tortugas encontró los restos de Carlos Ramírez Ávila.
En una fosa clandestina en inmediaciones de Vizcaíno, Luisa reconoció la camisa rosa y el pantalón de mezclilla que vestía su hijo cuando lo vio por última vez el domingo 23 de septiembre del 2018.
Su lucha, al igual que cientos de madres, ya no era para encontrar justicia, pero sí un poco de paz al poder darle el último adiós a su hijo y por lo menos conocer cuál sería su última morada.
“Básicamente hay que buscar, caminar mucho. Buscar cualquier indicio de prendas de vestir, osamentas. Me siento conforme por los avances. Ya el hecho de saber que no está tirado en un monte es reconfortante para mí como madre”, comentó Luisa Ávila sobre su experiencia de búsqueda con el colectivo BCS Sin Ellos No.
Las manifestaciones y protestas continuaron como selo distintivo para hacer notar el dolor y la inconformidad de los familiares de las víctimas de desaparecidos.
Los familiares lanzaron una invitación al gobernador del Estado, Carlos Mendoza Davis. Le pidieron que dejara la silla para salir a buscar a las personas desaparecidas.
Desde la frustración e impotencia, los manifestantes pidieron la presencia del mandatario un solo domingo para realizar expediciones de búsqueda codo con codo.
Sin representantes, que se notara el interés genuino de la autoridad estatal. Sin embargo, el gobernador respondió con una negativa a esta invitación.
Ante la importancia y frustración que dicen sentir por la indiferencia de las autoridades, los “Invitamos al señor gobernador que un día, un solo domingo salga con nosotros para que sienta todo lo que sentimos los familiares. Ellos nomás están sentados en esa silla y ahí no tienen sensibilidad de nada”, reclamaron.
“Como siempre manda un representante, que mande ese representante. El gobernador solamente en eventos sociales, si viene Timbiriche o cualquier artista ahí sí está”, señalaron los familiares.
Aunque por las manifestaciones se habían realizado por años, este 2019 se lograron avances importantes.
En junio, en su visita a BCS, el subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, se comprometió a apoyar con 10 millones de pesos a los colectivos de búsqueda de la entidad.
La representante del colectivo BCS Sin Ellos No, Petra Pulido, mencionó que el recurso serviría para comprar herramientas y combustible en las jornadas de búsqueda que realizan en todo el estado.
En esta misma visita, Alejandro Encinas Rodríguez alzó la voz ante las principales denuncias de los familiares de las víctimas: la indiferencia y negligencia de los agentes de investigación de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
El subsecretario de Derechos Humanos llamó a la autoridad judicial a cumplir con su responsabilidad para evitar la burocracia, el entorpecimiento y la negligencia.
Tras esta reunión el subsecretario con autoridades estatales, BCS recibía buenas noticias que apuntaban a que por fin se conformaría la Comisión de Búsqueda. La fecha límite era el 30 de septiembre y el plazo de acercaba.
Por su parte, la titular de la Comisión Nacional de Búsqueda, Karla Quintana Osuna, informaba que pondrían a disposición de los ciudadanos una página para que las investigaciones y búsquedas de desaparecidos puedan iniciarse sin necesidad de una denuncia oficial.
Mientras tanto, los familiares de las víctimas continuaban luchando para que la Comisión Estatal de Búsqueda quedara instalada lo antes posible y así no esperar hasta septiembre para lograrlo.
En el marco por el Día Internacional de la Desaparición Forzada, conmemorado el 31 de agosto, los casos dolosamente emblemáticos salieron a las calles una vez más. En forma simbólica, en una fotografía, en una carta, en el recuerdo de un familiar, los rostros de los desaparecidos marchaban nuevamente exigiendo justicia y paz.
Lisset Soto Salinas, menor de edad desaparecida en octubre del 2010, estaba presente en la voz y la lucha de su padre, Melchor Soto.
Ante el Palacio de Gobierno, Melchor recalcaba que no es uno, sino muchos los que permanecen desaparecidos en la entidad.
“La búsqueda debe ser inmediata, que se realice y se coordinen bajo la presunción de vida”, pidió Melchor Soto al exigir a las autoridades que la buena voluntad se convierta en resultados.
Además de exigir justicia y la localización de sus seres queridos, los familiares enviaron diversos mensajes a los habitantes de BCS. Pidieron unidad y solidaridad ante el dolor y también buscaron limpiar la buena reputación de los desaparecidos.
“Nos meten miedo para que no sigamos, pero no nos vamos a detener. Baja California Sur únete al dolor de nosotros”, señalaba una mujer que busca a su hermano desde hace años.
“No son maleantes, son personas como cualquier otra”, dijo una madre a los ciudadanos de BCS, recalcando que esta puede ser una cruel realidad que puede alcanzar a todos sin distinguir.
Aunque en este momento es la principal deuda de seguridad en el estado, los familiares obtuvieron un logro que por años se había reclamado: la instalación oficial de la Comisión Estatal de Búsqueda.
El 30 de septiembre, Lizeth Collins Collins fue nombrada titular de la Comisión de Búsqueda en la entidad.
A partir de este año, dicen los familiares y asociaciones, puede haber un cambio importante. Sin embargo, la lucha no terminará hasta que tengan a sus seres queridos de regreso en sus hogares.
El próximo 24 de noviembre realizarán una nueva expedición de búsqueda en el estado. “Las manos nunca sobran”, comentan, para quien quiera unirse.