La Paz, Baja California Sur.- Ante el amago del presidente estadounidense Donald John Trump respecto a tratar el narcotráfico en México como una amenaza terrorista para su país, el gobernador Carlos Mendoza Davis opinó que no podría considerarse terrorismo al narcotráfico, aunque sí una actividad delictiva trasnacional, por lo que la colaboración entre ambos países, enfatizó, pero sin intervención en la toma de decisiones, resulta indispensable.

El narcotráfico, sostuvo Mendoza Davis, es un “fenómeno delictivo transfronterizo […] que se ha venido presentando en nuestro país y en el vecino país del norte desde hace ya muchísimos años, y que, si bien es cierto, somos nosotros una ruta de paso y, en algunos casos hasta de producción de drogas, pues también lo es que Estados Unidos también tiene producción y también tiene un mercado muy importante, que es el destino final de lo que aquí se genera”. Además, comentó, “se trata, en primer lugar, de un tema que corresponde, en México, por supuesto, resolver a los mexicanos”. No obstante, subrayó, “si bien es cierto que hay que invocar la soberanía, también es cierto que tenemos que buscar la cooperación de ambos países, porque el fenómeno está interrelacionado en ambos lados”.

El gobernador del estado calificó este debate como “un buen momento” para entender “la preocupación que pueden tener los Estados Unidos” y asumir que “nosotros debemos estar preocupados por el problema de seguridad que tenemos”. Desde ese enfoque, hizo un llamado para que ambos gobiernos hagan “un planteamiento muy serio, un planteamiento muy honesto, en términos de una estrategia integral en seguridad”.

 “Generar una política conjunta, en donde aplique, por supuesto, la colaboración para poder resolver este problema: cada quien en el ánimo de sus competencias y en respeto a la soberanía de sus Estados […] En donde estemos involucrados los tres niveles de gobierno y podamos dar una solución a la altura y acorde a un problema que es muy complejo y que no tiene una solución sencilla”, abundó el mandatario estatal, y dejó claro que, a su ver, cualquier solución debe incluir colaboración con el gobierno de Estados Unidos (EEUU), pues se trata de una problemática que “no respeta fronteras”. 

En cuanto a cuál es la “colaboración” a la que hace referencia al hablar de tal vinculación binacional, Carlos Mendoza mencionó “intercambio de información” y “asistencia técnica y equipamiento”. En este sentido, recordó que en Baja California Sur (BCS), a través de la Iniciativa Mérida, se tuvieron “apoyos muy importantes, de equipamiento en materia de servicios periciales y de capacitación y entrenamiento para policías, por parte del gobierno de los Estados Unidos”, lo cual resultó “muy útil” para combatir el delito, aseguró. 

“Por supuesto que no”, respondió el gobernador cuando se le planteó la posibilidad de una intervención de EEUU para detener el narcotráfico en México: “una cosa es que nos den el equipamiento y nos ayuden con la capacitación, pero dejar en claro que las decisiones en México las tomamos nosotros, los mexicanos”, declaró.

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, sólo dijo respecto: “cooperación sí, intervencionismo no”, y evitó el tema. Por su parte, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, escribió en su cuenta de Twitter: “Haremos diplomacia de unidad nacional para defender la soberanía y decisiones propias”.