Cabo San Lucas, Baja California Sur.- En redes sociales se viralizó este miércoles 9 de octubre un video donde se observa a efectivos de la policía municipal que intentan retirar a un grupo de personas que pedían limosna en un semáforo de Cabo San Lucas (CSL).

Los hechos ocurrieron en el cruce de Bulevar Constituyentes y Bulevar Lázaro Cárdenas, en la salida a San José del Cabo (SJC). En el primer video, difundido por un particular, sólo se observa la discusión entre dichas personas, policías y un grupo de terceros que intentan impedir la detención de una persona del sexo masculino. Los hechos se magnificaron debido a que se trataba de al menos 2 personas con discapacidad, una de ellas en silla de ruedas, misma que posteriormente fue evidenciada en un video, captado por la cámara de personal policiaco, amenazando a un policía con demandarlo. 

“A mí me llega a pasar algo y yo lo demando a usted, a huevo, y hasta con los derechos humanos [...] No me voy a quitar, no se lo va a llevar tampoco, porque si me llega a pasar algo a mí, yo lo demando a usted y lo meto al bote de por vida a la verga”, dice la mujer, sentada en una silla de ruedas. 

Al respecto, el director general de Seguridad Pública y Tránsito Municipal, Juan José Zamorano Martínez, afirmó que no es la primera vez que se les retira del cruce vehicular, pues se les ha solicitado que tramiten el permiso ante el Ayuntamiento de Los Cabos para pedir apoyos económicos. Sin embargo, siempre ha habido negativa y hoy todo terminó en un “agarrón” por la falta de respeto hacia la autoridad, aunque al final no se realizó ningún procedimiento. 

“De inicio se les dio la indicación a las personas que, para tener este tipo de actividades, deben solicitar un permiso en la delegación o el municipio […] Desafortunadamente estas personas no han hecho ni han atendido la invitación de los oficiales, que han ido en repetidas ocasiones a realizar la indicación y el día de hoy se les fue a decir que por favor, si no tenían el permiso, se retiraran”, dijo el Capitán Zamorano. 

Una vez que “detonó” la discusión, al parecer los ciudadanos intentaron refugiarse en un negocio de venta de piedra, apoyados por terceras personas, donde ocurrió el jaloneo y, para evitar un conflicto mayor, únicamente los oficiales procedieron a retirarse.  

“Simplemente faltaron el respeto al oficial y éste iba a proceder a llevar a cabo una detención, pero no se realizó porque participaron otras personas que no tenían conocimiento de lo que estaba sucediendo, y al final de cuentas no se llevó a cabo la detención. Solo se les volvió a invitar a las personas a que, si tienen que realizar alguna petición, hagan lo correspondiente y soliciten los permisos por un periodo muy particular”, concluyó Zamorano Martínez.