San José del Cabo, Baja California Sur.- Mientras que para muchos menores la noche de Halloween es sinónimo de salir a las calles a pedir dulces, para otros esta fecha consiste en lanzar objetos como huevos y piedras a vehículos, domicilios, negocios o transeúntes.  

Es por ello que el director de la Policía Municipal de Los Cabos, Juan José Zamorano Martínez, señaló que causar daños a propiedades o personas durante la noche de brujas, a celebrarse este próximo 31 de octubre, es motivo de una sanción administrativa y en el en caso de que los infractores sean menores de edad serán sus padres los responsables de estas conductas, en función de la normativa del Bando de Policía y Buen Gobierno.  

El jefe policíaco aclaró que los menores que sean asegurados por incurrir en este tipo de faltas administrativas permanecerán en áreas especiales del edificio de Seguridad Pública, y no serán ingresados a la barandilla, respetando en todo momento sus derechos y garantías.  

“Cuando se trate de menores infractores se tienen áreas especiales en los que se mantendrán de manera provisional mientras se hace comunicación con los padres de familia.  En caso de que exista algún delito se hará de conocimiento a las procuradurías correspondientes tanto de DIF como la PGJE para ver el procedimiento que pudiera llevar a cabo, en ambos casos existe un lugar específico para poder tenerlos, dependiente de su situación, desde luego que existe una sanción administrativa (por causar daños al arrojar objetos)”, apuntó Zamorano Martínez. 

En el mismo contexto, dijo el titular de Seguridad Pública que para dichas festividades habrá de implementarse un operativo especial con el afán de mantener el orden y tranquilidad. “Salen niños y jóvenes a pedir dulces a las calles, vamos a realizar operaciones en particular como cada año sucede en estas fechas.  Particularmente en el área de Cabo San Lucas se espera haya una concentración grande de personas, estaremos muy al pendiente, instalaremos torres de videovigilancia para que de esa manera exista la disuasión para algún tipo de acto vandálico que no sea de acuerdo a la convivencia”, concluyó el capitán Zamorano Martínez.