• "Ya no hay partido de Estado, eso ya se terminó”, dijo.
Ciudad
de México. Al
advertir que los funcionarios de gobierno que participen en el proceso interno
de Morena o de cualquier otro partido serán despedidos, ya que “ya no hay
partido de Estado”, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que si la
resolución del Tribunal Electoral en Baja California establece que el periodo
del próximo gobierno de Jaime Bonilla será de dos años, se debe acatar.
En
referencia al proceso interno de Morena rumbo a la renovación de su dirigencia
nacional en noviembre, el mandatario indicó que es un asunto entre militantes y
dirigentes de esta fuerza política en la que no debe haber injerencia del
gobierno.
Durante
su conferencia de prensa subrayó: “El servidor público que intervenga en
proceso de partidos, en particular en el de Morena, va a ser despedido del
gobierno, y no sólo eso, voy a pedir, con todo respeto, que sea juzgado el
servidor público que participe en favor de candidatos utilizando recursos del
gobierno. El que quiera hacer trabajo, vida partidista, está en libertad, pero
la función del gobierno es otra complemente distinta”.
Anticipó
que no será suficiente el exhorto, por lo que enviará una carta a todos los
servidores públicos del gobierno federal expresando lo mismo “porque no
queremos vernos involucrados, además, sería algo nefasto, nosotros que hemos
luchado durante tantos años y padecimos tantos fraudes e injerencias en
nuestros asuntos internos de nuestros movimientos, que repitiéramos esas mismas
conductas. Ya no hay partido de Estado, eso ya se terminó”.
Luego
de analizar la vida del PRI en cuatro etapas desde su fundación como Partido
Nacional Revolucionario (PNR), subrayó que “eso ya no debe existir, nosotros no
aspiramos a eso, nada de partido de Estado”.
Además,
recalcó que no es de izquierda hacer trampas, así como ser oportunistas,
acomodaticios o trepadores.
El
mandatario fue cuestionado, además, sobre la resolución del Tribunal Electoral
que revocó la decisión del Congreso local de Baja California que ampliaba de
dos a cinco años el periodo del mandato del gobernador electo, el morenista
Jaime Bonilla.
Recordó
que el lema de su gobierno es “al margen de la ley, nada; por encima de la ley,
nadie”, y agregó que “es la decisión del poder judicial y hay que respetarla.
No sé si sea la última instancia, si lo es, se acata”.
Indicó
que desde la época de la colonia hubo una dinámica sobre respetar la ley en la
forma para violarla en el fondo, que derivó en quienes señalaban que se acata
una resolución, pero no se cumple, lo que quedó como mala práctica, “ahora no.
Ya hay una resolución que se tiene que cumplir”.
Reiteró
que el ejecutivo no es el Poder de Poderes, y no se habrá amiguismos, nepotismo
o ninguna de las lacras de la política.
Entre
los temas a los que se refirió el mandatario, adelantó que mañana viernes se
realizará la reunión de seguridad en Puebla, después de lo cual se realizará su
conferencia matutina en esta entidad.
Dijo
que cuenta con información que apunta al cambio de robo de gasolina, al robo de
gas en ese estado, tras la implementación de los operativos antihuachicol,
pero dijo no tener información que señale que en esta entidad, las bandas de la
delincuencia estén migrando del robo de hidrocarburos al secuestro u otro tipo
de delitos.
También
señaló que la reciente renovación en la filial Internacional de Pemex dedicada
a la compra y venta de petróleo se generó porque algunos estaban en su Consejo
llevaban casi 30 años, y “estamos limpiando, se reunió el consejo de
administración y se cambiaron a 10 directivos, empezando por el director
general, por los de arriba”.