Datos de la Coordinación de Comunicación Corporativa de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) señala que en el primer semestre del 2018 el robo de electricidad en México derivó pérdidas de aproximadamente 25 mil 700 millones de pesos
San José del Cabo, Baja California Sur.- Mientras los costos elevados en los recibos de luz ocasiona molestia e informidad entre decenas de usuarios del servicio de energía eléctrica en el municipio, son miles de personas asentadas en zonas de riesgo quienes siguen abasteciéndose de dicho servicio de manera clandestina.
Y es que, el robo de electricidad a través de los conocidos “diablitos” no es un fenómeno nuevo en el destino turístico, al igual que la falta de acciones concretas y efectivas no solamente por parte de la empresa encargada de generar y comercializar la energía eléctrica, sino de los propios gobiernos.
Para la mayoría de personas que habitan en estas zonas, colgarse de las líneas de electricidad pareciera les resulta un procedimiento muy fácil, aunque en muchos casos se tenga el conocimiento de que se trata de un delito.
Tan solo basta hacer un corto recorrido por alguna de las distintas colonias populares del destino turístico para observar la magnitud del problema que ha tomado el robo de energía eléctrica en los últimos años, situación que no solo genera pérdidas millonarias y sobrecargas en los generadores de electricidad, sino el riesgo latente que día a día viven las familias, muchas de ellas conformadas por menores de edad.
Si bien, es impreciso determinar la cantidad de tomas clandestinas de luz que existen en zonas de riesgo en el municipio de Los Cabos, se estima hay al menos 15 mil familias asentadas en este tipo de lugares, cifra que fácilmente sería duplicada por las conexiones ilegales.
Datos de la Coordinación de Comunicación Corporativa de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) señala que en el primer semestre del 2018 el robo de electricidad en México derivó pérdidas de aproximadamente 25 mil 700 millones de pesos.
Según la información ese monto representa un 5.71% de la energía recibida durante el periodo, pero en el caso de las pérdidas técnicas representa otro 5.89% que equivalen a 34,253 millones de pesos.
En consecuencia, la cifra total es de 59,953 millones de pesos, donde se incluyen las pérdidas técnicas y no técnicas, estas últimas se derivan de diablitos o cables colgados directamente de los postes.