Definitivamente el ambiente ha cambiado para bien en el Congreso de Estado por lo que la frialdad, prepotencia e indolencia con que se comportaron los diputados identificados como “puchistas” se ha convertido en una verdadera impotencia, la de no contar con la mayoría.

Vaya, ahora hasta los trabajadores del poder legislativo se mueven más tranquilos, más adaptados a un ambiente laboral lejos de la tensión y la prepotencia que en su momento aplicaron principalmente los diputados Esteban Ojeda, Homero González y no se diga la diputada Milena Quiroga que en su desesperación ambiciosa por ser considerada ya desde ahora la principal aspirante a la candidatura de Morena a la alcaldía paceña, ahora está prácticamente desactivada electoralmente.

Observar los lánguidos rostros de estos impotentes legisladores es tan evidente que en la sesión del pasado jueves quedó demostrado cuando intentaron interpelar y callar a la diputada priista Ana Beltrán cuando esta tomó la máxima tribuna estatal para cuestionar los evidentes errores del presidente Andrés Manuel López Obrador.

De piel delgada y políticamente sensible, este trio de diputados ahora se encuentran exactamente en el otro lado de las decisiones, en la zona de la minoría donde no podrán comportarse con la misma altanería que como hasta hace unos meses lo hicieron.

Se equivocaron y ahora pagan las consecuencias.

Estas repercusiones también han afectado la propuesta política del superdelegado Víctor Castro que cada día se observa más debilitado y que incluso ahora registra serias dificultades para encontrar a un sustituto adecuado de Alberto Rentería de la dirigencia estatal de Morena.

Tan complicado tiene este tema que Castro Cosío se ha visto forzado a pensar en impulsar la figura del mediocre regidor José María Avilés.

Este grupo perdió evidentemente la avasalladora fuerza con la que llegó al Congreso del Estado luego de las elecciones del año pasado.

Ahora las cosas se ven diferentes.

Por lo pronto, las expresiones de la diputada Elizabeth Rocha en el sentido de cuestionar lo que la “tolerancia” ahora exigen estos legisladores otrora poderosos, es otra muestra de que la circunstancia de los referidos morenistas, estará complicada en lo que resta de la actual legislatura.

Otra señal que seguramente será bien valorada en su momento, es la evidente intención que tienen los legisladores locales para sacar adelante una nueva ley de movilidad que atienda a todos los involucrados, no sólo a taxistas y transportistas en genera, o a quienes ofrecen servicios de transportación y son contratados vía aplicaciones electrónicas.

Para ello la nueva presidenta de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, la diputada Perla Flores y el diputado presidente de la Comisión del Transporte Rigoberto Murillo, se reunieron con integrantes de 18 agrupaciones de transportistas de los municipios de La Paz, Los Caos y Loreto.

La entidad requiere de una buena ley de movilidad y esta debe autorizarse por parte del Congreso del Estado en la que de manera equilibrada todo el sector del transporte y la sociedad en general se vea beneficiada.

Así que es evidente que el trabajo legislativo fluye de manera diferente por lo que se espera que las decisiones que se deben tomar en el actual periodo ordinario de sesiones que ahora preside la diputada Daniela Rubio, dará mejores resultados que los obtenidos hasta el cierre del anterior periodo de sesiones.

La población en general espera resultados legislativos que impacten de manera positiva en la entidad.

Esperemos que así suceda.