La Paz, Baja California Sur.- En conmemoración por el Día Internacional de la Desaparición Forzada, familiares de víctimas de desaparición salieron a las calles de la ciudad de La Paz a manifestarse ante la inactividad institucional. 

Vestidos de blanco como símbolo de la esperanza de encontrar a sus familiares, las manos ocupadas con cartulinas y lonas que muestran el rostro de sus seres queridos. Poco a poco se concentraban los dolidos en las calles 5 de Febrero e Isabel La Católica para marchar hacia el Palacio de Gobierno. 

La caminata de cada año, sin un cambio sustancial en las consignas. Lo único que cambia es el número de víctimas, cada vez se miran más rostros de familiares buscando a sus seres queridos. 

Una vez que la manifestación llegó a las instalaciones del Palacio de Gobierno, la ineficiencia, indiferencia e inactividad institucional por parte de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) se convirtió en el tema central de la marcha. 

“No es uno, son muchos. Nos faltan todos, ¿dónde están?”, dijo Melchor Soto, padre de Lisset Soto Salinas, desaparecida en octubre del 2010. 

El padre de Lisset Soto tomó el micrófono ante los más de cien manifestantes y exigió que la buena voluntad de las autoridades se convierta en acciones que den resultados ya. 

Tras recordar que la Fiscalía General de la República (FGR) no ha recibido a los familiares de las víctimas de desaparición, enseguida enlisto una serie de acciones que faltan por parte de las autoridades estatales. 

Mencionó que tras la homologación de la Ley de Desaparición de Persona en BCS, falta que se dote de presupuesto para dar movilidad a diversas aristas. 

“La búsqueda debe ser inmediata, que se realice y se coordinen bajo la presunción de vida”, pidió Melchor Soto. 

Otro asunto pendiente es la falta de pericia para atender problemáticas forenses de identificación en el estado, que llega a tomar meses. 

El padre de Lisset Soto hizo hincapié en que, aunque el gobernador, Carlos Mendoza Davis, publicó la Ley de Desaparición Forzada, no se ha avanzado en los términos para que se cree la Comisión y el ni el Consejo Estatal de Búsqueda. 

“Estamos en tiempo, el compromiso es que para más tardar el 30 de septiembre. No entendemos por qué la pérdida de tiempo sí desde marzo lo estamos implementando, Casi todo el país ya tiene sus comisiones y consejos ciudadanos”, acusó Melchor Soto. 

Tras la intervención del padre de Lisset, algunos de los asistentes tomaron el micrófono y expresaron su rabia, su dolor, su impotencia. 

Sin decir sus nombres, como una muestra de la colectividad que los arropa y ahora les da identidad, comentaron sus casos en la explanada del Palacio de Gobierno. 

“Hace 4 años desapareció mi hija. Las autoridades nunca dan respuesta satisfactoria, no esperen a que seamos más. ¡Ya basta! Por qué dicen qué hay 3 cuando hay 10 desaparecidos en menos de un mes”, gritó una madre frente a los manifestantes. 

“Nadie nos ayuda, ni siquiera quieren tomar las denuncias. Nos meten miedo para que no sigamos, pero no nos vamos a detener. Baja California Sur únete al dolor de nosotros”, compartió una mujer que busca a su hermano desde hace años. 

Otra madre, vestida de blanco pidió a los ciudadanos de BCS que no se queden con la imagen de que los desaparecidos “eran maleantes”, porque cuando menos lo espere la problemática los puede alcanzar. 

“A la gente pedirle que se acerque. No son números, son seres humanos. Son familiares nuestros, cuando menos lo esperen esto los va a rebasar”, advirtió la madre. 

“Nos quieren decir que es nuestra culpa porque nuestros hijos eran mal vivientes, pero no lo eran. Eran personas, como todos nosotros”, señaló otra madre. 

Tras cerrar las participaciones, invitaron a los ciudadanos y a los familiares de víctimas que se unan a las búsquedas.