• El proyecto Una milla en mis zapatos forma parte de la Bienal de las Américas, que se celebra ahora en Denver y es el resultado de la colaboración entre la artista inglesa Clare Patey y el filósofo Roman Krznaric
Una exhibición interactiva instalada ayer en
una calle de Denver, como parte de una bienal dedicada a la empatía, combina
arte, historias y humanismo para que los participantes puedan literalmente
caminar en los zapatos de otros.
El proyecto Una milla en mis zapatos forma
parte de la Bienal de las Américas, que se celebra ahora en Denver y es el
resultado de la colaboración entre la artista inglesa Clare Patey y el filósofo
Roman Krznaric, nacido en Australia y educado en Inglaterra.
“Cuando pensamos en cuál era la mejor forma
de conectar a las Américas pensamos en la empatía, porque ese es el elemento
faltante en nuestras relaciones”, dijo Erin Trapp, socióloga y directora
ejecutiva de la Bienal de las Américas en Denver.
La propuesta en sí es sencilla y
engañosamente simple: los participantes se ponen el calzado real que alguien
más usó y luego caminan por las calles de Denver a la vez que escuchan en
primera persona una grabación de la historia del dueño o la dueña de esos zapatos.
La exhibición permanecerá abierta hasta el 27
de septiembre y será el elemento central del Festival “Empatía en Acción” con
el que se clausurará la Bienal.
Y ADEMÁS, HISTORIAS PARA EL RECORRIDO
La exhibición en Denver incluye unas 30
historias contadas por indígenas, mujeres de color, personas transgénero,
refugiados e inmigrantes. También, demócratas y republicanos.