• De gira en Hidalgo, el presidente garantizó la ampliación de los 250 kilómetros de la carretera Pachuca-Huejutla
Es posible que una vez que rescatemos el
sector petrolero y el sector eléctrico, hasta bajemos los precios de los
combustibles, señaló ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador.
En la continuación de su gira por hospitales rurales, destacó que no
quiere que “nadie me diga, y hasta ahora no ha ocurrido: ‘Usted ofreció algo y
no cumplió’. Tengo ese orgullo”, comentó y resaltó que le pesa mucho saber
que los compromisos deben cumplirse. Siempre tengo esa preocupación.
Por eso, en la zona de la Huasteca ratificó que ya se creó la empresa
Telecomunicaciones e Internet para Todos, que proveerá de esos servicios a todo
México, hasta a las regiones más alejadas.
Tras recorrer el hospital rural de este municipio de la Huasteca
hidalguense, resaltó que nunca se había destinado tanto presupuesto para
el bienestar del pueblo. Así que garantizó la ampliación de los 200-250
kilómetros de la carretera Pachuca-Huejutla, de lo que está enterado el hidalguense
Arturo Herrera, secretario de Hacienda, a quien desde que era subsecretario le
pidió ayuda para que no falte presupuesto.
En su octava visita al estado –como parte de los recorridos que inició
el viernes en Cerritos, San Luis Potosí–, el Presidente recordó que el combate
al robo de combustibles ha costado pérdida de vidas humana –en referencia a la
explosión en Tlahuelilpan, Hidalgo, ocurrida el 18 de enero, cuando vecinos de
la zona sacaban gasolina de una toma clandestina–, es de las cosas que más
me duelen en el tiempo que llevo gobernando.
Ratificó que acabar con la corrupción e impunidad es la manera para
liberar fondos para el desarrollo.
Resultados
“Está dando resultados, no estamos aumentando
impuestos ni creando nuevos. No se está endeudando al país, al contrario,
estamos bajando la deuda; no hay gasolinazos, estoy cumpliendo el compromiso de
que no iban a aumentar en términos reales los precios de las gasolinas, del
diésel, del gas, de la luz, y lo voy a cumplir hasta el final de mi gobierno”.
Además, hay menos inflación que antes, el peso se ha fortalecido
con relación al dólar y tenemos presupuesto.
Posteriormente, el mandatario se dirigió por carretera a Chicontepec,
Veracruz (hora y media de distancia, aproximadamente), donde reiteró que
continuará visitando los pueblos, porque no me hallo en la Ciudad de
México, en Palacio Nacional.
A su arribo, se encontró con cientos de personas –más que quienes
estuvieron en la explanada del hospital rural donde dio su discurso– que
esperaban bajara de su camioneta para exponerle diversas demandas. Entre ellas,
de carreteras, inclusión de citricultores en Sembrando Vida; médicos y
medicinas en el hospital Llano Enmedio, en Ixhuatlán de Madero...
Entre el tumulto resaltaron los gritos de ¡Qué se baje, qué se
baje!, pero el mandatario descendió del vehículo tras vallas. Ahí le regalaron
un bat.
En las dos visitas –acompañado en Hidalgo del gobernador Omar Fayad, y
en Veracruz, de Cuitláhuac García, así como de integrantes del gabinete federal
de salud– se observó mayor vigilancia de militares.
López Obrador regresó por tierra a la Ciudad de México, luego de
recorrer alrededor de 360 kilómetros.