Las acciones anunciadas van en el sentido correcto y no creemos que hay riesgos de entrar en una fase de crecimiento negativo, dice el titular de Hacienda
MÉXICO
México no está en una “recesión técnica” y aunque sí hay una desaceleración económica, no hay riesgo de entrar en una fase de crecimiento negativo, afirmó el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Arturo Herrera Gutiérrez.
El encargado de las finanzas públicas del país aseguró que lo resultados de la estimación oportuna del Producto Interno Bruto (PIB), dado a conocer este miércoles por el INEGI, muestran que no hay recesión, aun con la definición no oficial de este término, que considera dos trimestres consecutivos con caída con cifras desestacionalizadas.
De acuerdo con esta estimación oportuna, refirió, en el segundo trimestre de 2019 la economía mexicana creció 0.4 por ciento respecto a igual periodo del año pasado y registró un ligero avance de 0.1 por ciento respecto al primer trimestre del año.
En rueda de prensa tras conocerse estos resultados, sostuvo que México no está en “recesión técnica”, como anticipaban algunos analistas, “pero de todos modos hay una desaceleración económica”, y para revertir este comportamiento el gobierno impulsa programas sociales y medidas de apoyo para la actividad económica, como las anunciadas el pasado lunes.
Las acciones anunciadas van en el sentido correcto y no creemos que hay riesgos de entrar en una fase de crecimiento negativo en los próximos dos trimestres; de hecho, lo que estamos esperando es que vamos a tener un crecimiento positivo y muchísimo más dinámico en el segundo semestre de lo que vimos”.
Sobre los pronósticos de los analistas privados, que anticipaban una caída en la economía en el segundo trimestre, opinó que “son mitad ciencia y mitad arte, yo no voy a pasar juicios sobre ellos, yo quiero pensar que la mayor parte de los analistas lo hacen con seriedad, algunos son más acertados que otros”.
Insistió en que la economía mexicana no entró en una recesión técnica, pero la SHCP tiene que atender el proceso de desaceleración, así como ver cómo cierra el año fiscal y preparar el paquete económico para 2020, para lo cual tienen que calcular el nivel de actividad económica.
La Secretaría de Hacienda dará a conocer un posible ajuste a los pronósticos de crecimiento de este año y el próximo cuando presente al Congreso su propuesta de paquete económico para 2020, cuya fecha límite vence el próximo 8 de septiembre.
Herrera Gutiérrez explicó que la economía mexicana está atravesando actualmente por una coyuntura cíclica, lo cual se explica en parte por factores externos, como la desaceleración económica global o incertidumbre por tensiones internacionales.
No obstante, destacó, también hay elementos que motivan optimismo como una inminente reducción en la tasa de interés de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, lo cual mandará señales de política monetaria más acomodaticias y bajará el costo de inversiones a nivel global.
Además, está el desarrollo con respecto a la ratificación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) sobre el cual “esperamos que en la próximas semanas estemos llegando ya a un proceso en el que este pueda ser ratificado”.
El secretario de Hacienda explicó que la economía tiene una característica cíclica, lo implica que siempre tiene periodos de expansión y de desaceleración, para lo cual se debe tener una política fiscal lista para actuar en los periodos de contracción.
Sin embargo, México no tiene esta política fiscal contracíclica y lo más parecido a ello es el Fondo de Estabilización de Ingresos Presupuestarios (FEIP), el cual cubre las brechas entre el ingreso programado y el real, tal vez por ingresos menores a los estimados o por una menor recaudación debido a la desaceleración económica.
Adelantó que el FEIP se convertirá en un fondo contracíclico con reglas claras, pero no para el año próximo, sino como parte de la agenda de mediano plazo de la Secretaría de Hacienda, lo que permitirá al país enfrentar en mejores condiciones y de estabilidad la volatilidad natural de los ciclos económicos.