La Paz, Baja California Sur.- En el último año, las autoridades de la Mesa de Seguridad han expuesto las problemáticas que existen en estado para lograr que los jóvenes se interesen en la carrera policial. 

Las depuraciones policiacas por exámenes de Control y Confianza, obligan a las autoridades a estar en constante búsqueda de nuevos prospectos para las filas de las corporaciones de seguridad. 

El titular de la Secretaría General de Gobierno del Estado, Álvaro de la Peña Angulo, ha informado en entrevistas pasadas, que incluso se han visto obligados a buscar jóvenes en otras entidades de la República ante el poco interés de los ciudadanos en Baja California Sur (BCS) en la carrera policial. 

Desde la perspectiva del elemento de Seguridad Pública Municipal, Carlos Vega, es complicado que un joven se interese en un oficio que no ofrece garantías reales para su ejercicio. 

Recordó que su hijo, Carlos Vega, fue un policía que dio la vida en el cumplimiento de su deber, sin embargo, a 9 años del caso no ha encontrado justicia. 

Para el padre de la víctima, este es un mensaje que muestra el desamparo en el que se encuentran las personas que laboran en seguridad pública. 

El elemento recalca que administración tras administración, los policías ven cómo aumentan el salario a trabajadores de base, pero al servidor público que expone su vida no lo toman en cuenta. 

“Son puras promesas para los policías, yo veo mal que les prometan mucho. Primer lugar: los salarios están bajo los suelos. En segundo lugar: el recurso, sus garantías tanto individuales como jurídicas”, comentó Carlos Vega a Diario El Independiente. 

“No tienen el equipo necesario. ¿Los están capacitando? Sí, pueden tener mucho conocimiento pero si no tienen con qué aplicarlo. Tienen deficiente equipo, uniforme, salario”, dijo. 

Esta historia no es nueva. El agente menciona que la precaria situación de los policías municipal ha prevalecido. En muchas ocasiones no los contemplan como personas y sufren la constante violación de sus garantías individuales. 

“Fue lo que pasó con mi hijo, a él le gustó el trabajo. Pero no por ser un servidor público, lo maten y que ya quede así. Al contrario, los elementos de seguridad tienen familia, son del pueblo. Cuando no están ellos, sus familias los sienten”, señaló Carlos Vega. 

“Los jefes, los funcionarios de arriba son los que se paran el cuello. No se vale así. Si quieren que un elemento les responda, que lo capaciten y que le paguen bien”, recalcó a este matutino. 

Las condiciones laborales de los policías no son un secreto. Tampoco lo es el hecho de que BCS ocupa permanentemente el segundo lugar nacional en elementos reprobados en Control y Confianza. 

El último estudio del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) arrojó que un 32% de los casi 3 mil policías evaluados reprobó el examen de Control y Confianza. 

Las autoridades de la Policía Municipal de La Paz han reconocido que los agentes no tienen acceso a diques de contención por la carga de la labor policiaca, como apoyo psicológico ante el estrés por las largas jornadas que llegan a sobrepasar las 12 horas. 

Y es que realidad, las condiciones laborales de los policías sólo son noticia cuando las autoridades comienzan con los procesos de depuración. En esos momentos, los agentes se manifiestan ante despidos que suelen realizarse opacamente. 

Hace aproximadamente un mes, el Sistema Nacional de Seguridad Pública reveló que La Paz recibirá alrededor de 20 millones de pesos del programa Fortalecimiento Municipal, el cual debe aplicarse en materia de seguridad. 

Sería interesante saber si, además de la clásica compra de patrullas, por primera vez en un Ayuntamiento se voltea para resolver la precaria situación en la que laboran los elementos.