La Paz, Baja California Sur.- La asociación Letras, Legalidad y Transparencia, denunció que la contratación de Azucena Meza como nueva contralora del Ayuntamiento de La Paz es un “ejercicio de compadrazgos” por parte del alcalde, Rubén Muñoz Álvarez. 

El abogado y representante de la asociación, Arturo Rubio Ruiz, argumentó que la contratación de la nueva contralora no es objetiva, porque se eligió en función a la cercanía y a la permanencia del equipo del presidente municipal. 

La designación, según el abogado, va en contra del principio de creación de las contralorías: vigilar, supervisar y, en su caso, denunciar anomalías o irregularidades en la administración pública. 

“Es una verdad sabida, es una verdad notoria. Ha sido público que la persona designada como contralora ha estado muy cerca al presidente municipal. Tiene un compromiso muy fuerte con él, estuvo en su campaña”, expuso Rubio Ruiz. 

“Nos hace suponer que existe entre ellos una vinculación muy fuerte, hay un compromiso. Eso le restaría, desde el punto de vista analítico, objetividad en su desempeño”, comentó. 

La figura del contralo nace de una necesidad de transparencia, es por eso que quien sea contratado para este cargo debe ser una persona ajena, sin vínculos laborales, afectivos y/o sanguíneos con el funcionario al que va a supervisar. 

“Va a ser muy difícil que se realice con objetividad por la cercanía con el alcalde, no hay transparencia en la contratación”, recalcó Arturo Rubio. 

De acuerdo con el representante de Letras, para que las contrataciones de contralores no se realicen por designación ni compadrazgos se necesita adecuar el marco legal a las exigencias de transparencia. 

“Tenemos un marco normativo que es de hace 40 años. Habría que adecuar la legislación y evitar que se dieran estos ejercicios de compadrazgos a la designación de quien va a supervisar la actuación del servidor público”, finalizó Rubio Ruiz.