Afirma el presidente que al final del sexenio 55 millones de personas que no tienen servicios médicos los tengan; reitera plan para integrar instituciones en un solo sistema
MÉXICO
Al final del sexenio, los 55 millones de personas que no cuentan con servicios de salud serán incluidos en el nuevo Instituto de Salud para el Bienestar planeado por el Gobierno federal, anunció Andrés Manuel López Obrador.
Al presentar oficialmente a Zoé Robledo como director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), López Obrador dijo que recibió un sistema de salud en ruinas.
“Me comprometo a que en este gobierno se haga valer el derecho del pueblo de México a la salud.
“Lo único que quiero es un poco de tiempo porque dejaron en ruinas el sistema de salud”, aseguró López Obrador en su rueda de prensa matutina en palacio Nacional.
El titular del Ejecutivo reiteró que el IMSS y el ISSSTE dan servicio al 55 por ciento de la población, y quienes no estás atendidos por estas instituciones ni por la Secretaría de Salud serán incluidos en un nuevo sistema de seguridad social que comenzará a operar en la presente administración.
“Y el Instituto de Salud para el Bienestar, para atender a la población abierta y contemplando la prevención, que es fundamental, es mejor prevenir que curar en el caso de las enfermedades que más están afectando: diabetes, obesidad; lo mejor es la prevención”, reiteró el presidente.
El Instituto de salud para el bienestar junto con el IMSS, el ISSSTE y la secretaría de Salud se integrarán en un sistema que permita abarcar a toda la población que requiera atención médica gratuitaIntegrar todo el sistema de salud. Y el compromiso que estoy haciendo es que vamos a tener un sistema de salud como el que tienen en Dinamarca, como el que tienen en Canadá. Y nos va a alcanzar al presupuesto porque no es un problema de falta de presupuesto, es un problema de corrupción”, planteó el titular del Ejecutivo.
Adelantó que la próxima semana dará a conocer el recuento de hospitales, clínicas y centros de salud que las administraciones anteriores dejaron en obra negra, sin equipos ni personal para atender a los pacientes.