• El artista conceptual chino convivió ayer con los asistentes a la muestra, se tomó fotos y firmó libros
CIUDAD DE MÉXICO.-El artista y
activista chino Ai Weiwei arrancó ayer los aplausos de los asistentes al primer
día de la exposición Restablecer memorias, cuando irrumpió en la sala 9 del
Museo Universitario de Arte Contemporáneo (MUAC). La visita inesperada del
también cineasta y fotógrafo motivó a los espectadores a observar con mayor
detalle las obras que integran la muestra, Retratos de LEGO, Caso Ayotzinapa y
el Salón ancestral de la familia Wan (2015).
Según el departamento de
prensa del museo, que festeja su primera década de vida con esta exhibición,
hasta las siete de la noche habían visitado la muestra, que permanecerá abierta
hasta el próximo 6 de octubre, unas 3 mil 394 personas.
La obra más significativa es
el retablo compuesto por los retratos de los 43 normalistas desaparecidos en
Ayotzinapa en septiembre de 2014, construidos por un millón de piezas de LEGO;
e incluye la proyección de los avances del documental To be, que reúne
entrevistas con los padres y amigos de los jóvenes, con policías, funcionarios
y expertos, y que el próximo año estará ya en festivales internacionales de
cine.
El disidente, que vive en
Berlín, permaneció unas tres horas conviviendo con su público, se dejó tomar
fotos y firmó libros, bolsas o lo que la gente le llevara.