San José del Cabo, Baja California Sur.- “Ciudadanía y amigos, es una vergüenza, una grosería y una impotencia ver en qué condiciones se encuentra el organismo de agua potable y especialmente la planta potabilizadora de San José del Cabo en la colonia Vista Hermosa, un gran proyecto que se hecho a volar y que se tenía una gran esperanza en ella para abastecer a familias cabeñas, pero que desgraciadamente está siendo manejada por malas manos, los responsable del mal funcionamiento de la planta potabilizadora son los ahora dueños del sistema, el gran maestro ambientalista Ramón Ojeda Mestre, la súper administradora Cecilia Soto y su sobrino político, Héctor Pérez”, exponen trabajadores del Organismo Operador del Sistema Municipal del Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento (Oomsapas) de Los Cabos, de manera anónima a la redacción de este medio informativo. 

En este escrito, exponen que lo más preocupante del mal funcionamiento de la planta, es que se está poniendo en riesgo la vida de la ciudadanía que se abastece de la planta y de su vital líquido, como son los habitantes de Vista Hermosa, Villas de Cortés y parte del Zacatal, pues les están mandando agua sucia y sin la potabilización adecuada, pues no está clorada con sulfato de aluminio y como se puede ver en las fotografías que acompañan la denuncia, sin darle el mantenimiento adecuado a los depósitos. 

“La orden fue, manden el agua sin cloro, la planta no se puede parar, cómo puede ser posible esto, agua puerca sin cloro, esto da enfermedades intestinales, cólera, etc. Pero oh sorpresa, la señora Cecilia Soto para ahorrarse dinero, autorizó la compra de pastillas de cloro para uso exclusivo de albercas, más no para darle tratamiento o cloración al agua, qué persona hace esto, aparte el disque ingeniero Héctor, instala estas pastillas en diferentes puntos de los depósitos sin ninguna medida, qué persona pone en riesgo la vida de muchas personas, esto no puede estar pasando, no queremos a esta gente en el organismo, gente sin escrúpulos”, relatan. 

Aunado a lo anterior, acusan de que todos los desechos tóxicos están siendo descargados a las afueras de la planta, mismos que ya han formado una laguna, lo que significa una gran contaminación de sulfato de aluminio, polietileno, cloro, entre otros, que en caso de alguna lluvia, pudieran derramarse hacia los hogares de las familias josefinas. 

“Pueblo, queremos agua limpia y segura y no esta porquería que nos manda el ambientalista Ramón Ojeda, la administradora Cecilia Soto y su sobrino Héctor Pérez, que le ha solapado todo, los queremos fuera del organismo, gente como esta no deberían ser servidores públicos, están envenenando al pueblo y a nuestros hijos, espero y esto llegue a la ciudadanía y a las autoridades correspondientes. Gracias esto no debe seguir”, exponen. 

Para concluir, destacaron el hecho de que a los trabajadores que se mantienen al tanto de la potabilizadora de 80 litros por segundo, los mantienen viviendo condiciones inhumanas, sin vehículo, radio o comunicación alguna.