· Con Maquillada unidad Morenistas celebraron la victoria electoral del PRD-PT de 1999 · ¿Ya perdonaría López Obrador la traición de Agúndez Montaño en el 2006? · La confrontación más clara (aunque se trate de disimular) está entre el subsecretario Leonel Cota y el representante del gobierno federal en la entidad Víctor Castro
Cada día queda más claro que
al interior de Morena en la entidad, la vista en el 2021 está muy definida por
lo que hagan o dejen de hacer forma parte de la pretensión de llegar
posicionados para la próxima contienda electoral.
Sin embargo dentro de este
partido político que acaba de llegar al poder a nivel federal y que aquí en la
entidad se desgarra internamente para alcanzar mayor protagonismo, los ha
llevado a cometer errores.
Vale decir que no todos los
que representan ahora a Morena, son bien vistos por el presidente Andrés Manuel
López Obrador, como por ejemplo el exgobernador Narciso Agúndez Montaño quien
se considera dueño del PT local y que hasta ahora no ha recibido “la bendición”
del nuevo gobierno federal.
No es para menos, Narciso
Agúndez fue el gobernador del PRD que en su momento no simpatizó con la
resistencia que realizó López Obrador en la lucha por la presidencia del país
en el 2006, justamente cuando Leonel Cota Montaño, era el presidente nacional
del PRD.
Aún no se levantaba el plantón
organizado por López Obrador en el zócalo, Reforma y la calle Madero en la
ciudad de México, cuando Agúndez Montaño ya se encontraba reunido con el
presidente electo de aquel momento el panista Felipe Calderón.
Todo paree indicar que aquel
momento no ha sido olvidado por el ahora presidente de los mexicanos.
Claro que ese detalle por
ejemplo, no fue mencionado en la conmemoración de los 20 años en que el PRD y
el PT ganaron con Leonel Cota Montaño, la gubernatura en la entidad luego de ya
muy conocida e histórica fractura al interior del PRI.
Claro que en esta
conmemoración de la victoria de la alianza PRD-PT de 1999, no estuvieron todos
los que participaron en aquella contienda, así como tampoco los que estuvieron
en esta celebración quienes participaron realmente en el proceso de hace dos
décadas.
Lo más lamentable es que ahora
con la representación del gobierno federal, se olviden de que son funcionarios
para la población en general y que caigan en prácticas que se supone no son
aceptadas por el propio López Obrador.
Está claro que lo que se busca
es tratar de revivir aquel ánimo social que alguna vez apoyó al PRD y PT y que
se nutrió con la arribazón de priistas inconformes que finalmente llegaron al
poder estatal donde se mantuvieron por dos sexenios.
Es evidente que hay más
preocupación por lo que se pueda construir de ahora al 2021 que resolver la
propia problemática actual que por cierto parece que va en aumento pues aún no
queda claro siquiera quienes serán los funcionarios que estarán en las diversas
áreas del gobierno federal.
Ya mencionábamos en nuestro
comentario anterior las dificultades que enfrentan los “novomorenistas” para
alcanzar en la entidad un espacio en la administración federal, por lo que
algunos de ellos se atrevieron a salir a la calle a levantar la bandera de
Morena aún a costa del riesgo de ser acusados de caer en una histórica y cínica
contradicción.
Por supuesto algunos en
política no tienen memoria y caer en contradicciones políticas los tiene simple
y sencillamente sin cuidado.
Veremos cuánto durará la
maquillada unidad entre morenistas que esperan ya desde ahora la primera
oportunidad para marcar su distancia a la hora de posicionarse en el proceso
electoral del 2021.
La confrontación más clara
(aunque se trate de disimular) está entre el subsecretario Leonel Cota y el
representante del gobierno federal en la entidad Víctor Castro. Ya veremos
quién se queda con la mejor parte.
Ya veremos.