• “Pensar en el 2021 mantiene cegados a representantes del gobierno federal y a alcaldes de Morena, es tiempo de que ya respondan a la población”: Carlos Rochín • Aún no hay titulares de las áreas federales mientras que cien días de labor las alcaldías aún no son convincentes • La población votó con una gran carga de confianza en la propuesta de Morena, confianza que puede perderse si no se actúa lo más rápido y eficientemente posible
A más de sesenta días de
gobierno federal y a poco más de cien días de los ayuntamientos
sudcalifornianos emanados de Morena. Hasta ahora las diversas áreas conocidas
anteriormente como “delegaciones federales” aún se encuentran acéfalas mientras
que las autoridades municipales no han podido encontrar el punto de equilibrio
para generar confianza en la población.
Esto genera presión a los
alcaldes y a quienes representan el gobierno federal, precisamente porque está
claro que ya es tiempo suficiente para que se aterricen por lo menos gran parte
de los ofrecimientos hechos durante la pasada campaña electoral.
Al respecto el dirigente
estatal del PAN Carlos Rochín Álvarez en conferencia de prensa cuestionó esta
situación quien además consideró que todo parece indicar que las autoridades locales
emanadas de Morena consideran que esperan ser cubiertos por la imagen del
presidente Andrés Manuel López Obrador.
Además consideró que “pensar
en el 2021, les está nublando la vista” y es que está claro que los integrantes
de la clase política morenista, ya presentan claras intenciones de posicionarse
lo más posible para estar en condiciones de figurar una vez más en el proceso
electoral dentro de tres años.
Por supuesto que para muchos
ciudadanos resulta difícil confiar en las nuevas autoridades cuando escuchan a
una alcaldesa como Armida Castro en Los Cabos que se asume como ignorante en el
tema del agua potable y deja toda la responsabilidad a los técnicos, justo
cuando el propio director del sistema de agua potable en Los Cabos Ramón Ojeda
Mestre, no sólo no puede con el paquete sino que su soberbia, ya denunciada en
su momento por ejidatarios del norte del municipio cabeño, se le escurre por
todos lados.
Cien días donde parece que son
más las buenas intenciones que los resultados concretos para el beneficio de la
población.
Obviamente en La Paz, el
problema que ahora está en la polémica mediática es el que tiene que ver con la
organización del carnaval de este año que a cuatro semanas de llevarlo a cabo
está inmerso en un verdadero y penoso caos.
Desorganización y una
insultante improvisación es que ya se observa en la pésima planeación de la
fiesta más tradicional de este puerto que es precisamente el carnaval en donde
además ahora cuentan hasta con la renuncia de la reina de las celebraciones carnestolendas
del año pasado.
La desorganización es
evidente.
Respecto al gobierno federal
que en la entidad la representa hasta ahora Víctor Castro Cosío, la tardanza en
nombrar a los titulares de las diversas áreas es ya cuestionada por la ciudadanía
que hasta ahora tiene que esperar a que al interior del grupo gobernante se
pongan de acuerdo.
Más allá de mantener como prioridad
el moverse en función de los intereses electorales del 2021, lo cierto es que
el tiempo se acaba para mantener la petición a la población que aguanten y se
esperen a que la representación del gobierno federal se organice al interior
para nombrar a los nuevos titulares de sus diversas áreas.
Y por supuesto para los alcaldes
será necesario hacer algo más que declaraciones mediáticas cargadas solo de
buenas intenciones catalogadas algunas hasta de románticas y aterrizar con hechos
concretos los compromisos contraídos con una población que votó con una gran
carga de confianza en la propuesta de Morena.
Confianza que puede perderse
si no se actúa lo más rápido y eficientemente posible desde las nuevas representaciones
populares.
Ya veremos qué sucede en las
próximas semanas.