· ¿Qué nos dejó la navidad y el año nuevo?...muchas cosas viejas que sólo las renovamos…y nuevas que refrendamos de las viejas · Pensamiento poético, familiar, a doña Lupita en este fin de año
Que si qué
nos dejó ¿y dejará?) la navidad y el año nuevo…pues, digo yo, dentro de varias
“cosas viejas y malas ¿qué renovaremos?, mmm…o nuevas que refrendaremos o confirmaremos
para bien (“no todo está perdido en Dinamarca”), sólo pondré como ejemplo-por ahora-esta
mala.
Según la
más reciente información. Los salarios mensuales netos que reciben los
empleados de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y del Consejo de
la Judicatura Federal (CJF) van desde los 13 mil 369 hasta los 269 mil 215 pesos,
además de otras percepciones anuales como un pago por riesgo (554 mil 595
pesos), aguinaldo (444 mil 380 pesos), asignaciones adicionales (428 mil 553) y
prima vacacional. Así, de acuerdo con las remuneraciones vigentes de los
servidores públicos del Poder judicial de la Federación establecidas en el
Diario Oficial de la Federación (DOF), los trabajadores también tienen derecho
a recibir seguro de gastos médicos mayores, ayuda de gastos funerales, ayuda de
anteojos, estímulo por antigüedad, estímulo por jubilación, ayuda de despensa,
estímulo del Día de la Madre y el Padre, entre otros. Para estas prestaciones,
de acuerdo con el manual que regula las remuneraciones de los servidores
públicos del Poder Judicial de la Federación, el organismo realiza las aportaciones
ordinarias por cuenta del servidor público por un monto neto igual al 2, 5 o 10
por ciento que aporte éste de su sueldo básico.
* Al igual que
los ministros de la SCJN, los consejeros del Consejo de la Judicatura también
reciben un pago por riesgo anual de 554 mil 595 pesos. Es decir, los salarios
netos mensuales de la Suprema Corte de Justicia y el Consejo de la Judicatura
no llegan, en lo individual, a los 600 mil pesos pero sus remuneraciones sí
aumentan cuando se suman los montos de sus prestaciones. Además, el salario de
algunos de los integrantes del Poder Judicial sí sería mayor al que recibirá el
Ejecutivo federal, que será de 108 mil pesos mensuales, (o poquito más, si
acaso); digo.
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PENSAMIENTO POÉTICO, FAMILIAR, A DOÑA LUPITA EN ESTE
FIN DE AÑO
Hace unos
cuantos años se me ocurrió irle componiendo una serie de acrósticos a ciertas cosas y personas, dentro de éstas les
hice a familiares cercanos, sobre todo en estas fechas navideñas y de fin de
año. Y ahora a fines del 2018 como estaba delicada de salud mi suegra-que es
muy querida y respetada por la familia y por mí mismo- alguien me dijo que le
debiera dedicar algún pensamiento “y lo dices el año nuevo”. De acuerdo, no
haré un acróstico pero sí, más adecuado un pensamiento. Va.
PENSAMIENTO
POÉTICO A DOÑA LUPITA
Por Luis
Manuel Dibene Geraldo
A ti, mujer divina que siempre en la vida has ido caminando, traspasando
mil vallas, fronteras y barreras en diferentes espacios. Creciste desde niña a
mujercita, desde grande a mujer mayor hasta ser la señora y doña, la mujer,
doña lupita…
Siempre plena de bondad qué ofrecer, de carisma y espíritu que dar y
así, desde aquel ayer que pasaste y traspasaste la valla infantil queriendo y
siendo querida por tus padres, hermanos y familia…y después en la juventud, la
otra valla y frontera de la vida que libraste hasta encontrar tus nuevas
querencias y estar con ellas, tu familia propia, que con ella siempre, volviste
a traspasar una y otra territorial frontera, uno y otro estado y territorios de
nuestro México querido…para llegar al extremo sud
peninsular, a La Paz. Y junto a ti siempre siempre don Renato Vázquez, tu
esposo y padre amoroso, de trabajo y lucha social, conformando ambos la grande
y bonita familia: los Vázquez Pineda…
Tú, mi gran señora Lupita, a
quien recuerdo siempre alegre, haciendo y defendiendo, ayudando y apoyando, ya
a los tuyos, ya a los otros y otras, con su sapiencia y espiritual entrega…
Y en este ir y devenir, el símbolo navideño siempre estuvo presente así
como el requiescat por el año que comienza a unos días de la navidad, y ahora,
la del 2018, donde maravillosamente ¡tú estuviste con nosotros, una vez
más!...que la volvimos a pasar juntos todos como en las otras que una a una así
sucedía, con la nutrida cena, en el musical ambiente, entre brindis y abrazos
en familia y amistades, como ahora que a pesar de tú cansancio, cómo no, ¡si ya
se asoma el siglo de tu vida!. Así es como este año nuevo del 2019 hoy
nuevamente festejamos junto a ti, la madre, la esposa, abuela, bisabuela,
hermana, amiga, y suegra…Y sigues con tu familia en ésta tu otra querida tierra
de Sudcalifornia donde arribaron a mucho tiempo y…¡te quedaste!, se quedaron
todos…Y nos viste crecer, jugar, estudiar y lograr metas.
Doña Lupita, ya pasaste pues con tus querencias una y otra y otra
navidad, uno y otro nuevo año, visionando de ese ayer y en el ahora el avanzar
de las generaciones que formaste, primero de tus hijos, luego de tus nietos y
hasta tus bisnietos…
Y también viste y sentiste partir seres muy queridos que fueron llamados
por Dios, y seguiste con el mismo carácter y entereza, de bondad y entrega
familiar que ya tenías, y tienes de por siempre…
Y en esta navidad de este diciembre del 2018, yo pienso que Dios te dio
permiso para que siguieras con nosotros. Y es que también seguramente algo
tiene que ver tu nombre con la Virgen de los mexicanos, la virgen de Guadalupe,
la madre de Jesucristo, porque es tu nombre también, ¡señora Lupita!
Creo entonces que con esto se dice todo, porque llamándote Guadalupe, te
hiciste niña, te hiciste joven, te hiciste madura y te hiciste de la edad cerca
del siglo: Guadalupe, Lupita, Doña Lupe.
Por eso en este año nuevo del 2019 nuestro Dios generoso seguramente
dijo: sigue con tu gente Guadalupe, sigue con tu familia y sigue conmigo desde
allá, desde sus vidas, en estas sus fechas y reencuentros que son las tuyos
también.
Qué inmenso eres Dios al concedernos ahora a ésta grande y extendida
familia, el gozo y la alegría navideña y un especial año nuevo al dejárnosla
presente.
Por eso y más yo te entrego madre y abuela mi amor eterno, dirán tus
hijos; te entrego mi cariño, dirán tus nietos; te entrego mis respetos dicen
tus yernos, nueras y amistades, y el perdón y recepción, te lo dará Dios, que
desde ya está contigo, que hacia él partirás cuando Dios quiera. La Paz, B.C.S.
a 31 de diciembre de 2018.