La Paz, Baja California Sur.- Durante el primer foro del Matrimonio Igualitario que se realizó en la sala del Congreso Estatal de Baja California Sur (BCS) en La Paz, un grupo de personas se presentaron con mantas con escritos que vinculaban al matrimonio igualitario y al aborto con temas de índole religioso, haciendo alusión a actividades "satánicas".

Una vez que la activista pro Derechos Humanos y a favor de la comunidad LGBTTI pronunció su postura sobre el tema, un grupo de hombres y mujeres se levantaron de sus asientos y se plantaron en la parte trasera del salón con mantas que señalaban que el matrimonio igualitario era un sacramento satánico, añadiendo vejaciones como "abortistas" y "feminazis".

La mesa de discusión quien se mantuvo serena y respetuoso de la actividad, estaba conformada por Rosa María Macías Macías directora de la Casa Jurídica en La Paz, Eunice Gutiérrez Cruz de la dirección de estudios y promoción del desarrollo de los Derechos Humanos, María Petra Juárez presidenta de la Comisión Permanente de Derechos Humanos así como la diputada Rosalva Rodríguez López y Ana Beltrán Peralta de la Comisión Permanente de Igualdad de Género.

Marcos Castrejón uno de los manifestantes, señaló que el matrimonio "natural" es un buen ejemplo en nuestra sociedad, misma que aseguró está siendo atacada por estar bajando la guardia, recalcando que nadie nace con un género pero sí nacemos con un sexo. Las ideologías de género señalan que el género se construye socialmente independientemente del sexo con el que se nazca.

"Estamos en pie de lucha y venimos de tierras cristeras de Michoacán, a nivel nacional estamos moviendo porque somos católicos y creemos en el dios padre que nos dio la vida, y vamos a defender la vida aunque nos toque morir [...] vamos a empezar a monitorear a los legisladores y vamos a identificar a los verdaderos enemigos de nuestra sociedad", agregando que el matrimonio igualitario debería de ir a consulta ciudadana.

Por otra parte durante el foro se reconocieron los distintos tipos de familias, señalando que todos los estados deben impugnar por adecuaciones a su legislación que ofrezcan como resultado las prácticas administrativas y judiciales que garanticen los Derechos Humanos, pues la discriminación sexual es una categoría protegida por los artículos 1 y 24 de la Convención Interamericana de los Derechos Humanos, derechos que el gobierno estatal no ha querido reconocer.

"Considerar que la finalidad del matrimonio es la procreación, constituye una medida no idónea para cumplir con la única finalidad constitucional a la que puede obedecer esto, como es la protección de la familia como una realidad social", aunado que no aceptar el matrimonio entre parejas del mismo sexo a pesar de tener los requisitos y las condiciones similares a las heterosexuales, incurre en severa discriminación por orientación sexual.

Se recalcó que la orientación sexual no constituye un aspecto relevante para hacer la distinción con el fin constitucional, y como el fin del matrimonio no es la procreación es entonces que las uniones no deben ser herméticamente heterosexuales. Señalaron que los prejuicios históricos y la negación de este derecho impide a las personas tomar decisiones fundamentales en su vida ya que afecta el libre desarrollo de un proyecto de vida, "se debe redefinir el concepto de matrimonio para no vulnerar los derechos humanos".