La Paz, Baja California Sur.- En su tercer informe de gobierno, el mandatario de Baja California Sur (BCS), Carlos Mendoza Davis, destacó el crecimiento económico que registró la entidad en el tercer trimestre del 2018. 

“Somos el primer lugar de crecimiento económico nacional en 2017 con 12.4 por ciento, y este año lo hacemos a un ritmo de 18 por ciento de acuerdo al INEGI. Crecemos 9 veces más que la economía nacional. Si fuésemos un país, triplicaríamos el crecimiento de China, India o Vietnam”, anunciaba con enjundia Carlos Mendoza en su informe. 

Según el gobernador, el sector secundario registró el crecimiento más alto del país: 79% en un año. 

“Hoy, el sector privado confía e invierte: Durante el año 2017 la inversión extranjera directa fue de 513 millones de dólares, la más alta los últimos cinco años. Se han creado 35 mil nuevos empleos, de acuerdo al IMSS: somos el segundo lugar nacional. Según INEGI tenemos los mejores salarios del país”, enfatizó Carlos Mendoza. 

En la exposición del crecimiento económico, el gobernador aseguró que los salarios en La Paz son los mejores del país, con un promedio mensual de 14 mil 278 pesos: 20 por ciento superior a la ciudad de Hermosillo, que ocupa la segunda posición. 

Sin embargo, la pregunta que el ciudadano promedio se hace ante las altas cifras es si realmente el crecimiento económico que reporta BCS le beneficia directamente. 

El economista explicó en un estudio el origen de la cifra de crecimiento económico del 18.1% anunciada por el gobernador. 

La fuente de la cita es México, ¿Cómo vamos? y hace referencia a un crecimiento trimestral, anunciada como un crecimiento anual, según explica el economista. 

“La cifra que utilizó el gobernador, se refiere a la variación porcentual respecto al igual trimestre de 2017. Esto es algo conveniente pues ese mismo trimestre de 2017 el indicador fue de 126.7 mientras que en 2018 (el anunciado) de 149.7”, expuso. 

El especialista comparte que estos datos están basados en el Índice de Volumen Físico (IVF), que se refiere a una variación en las unidades producidas por periodos; es decir, un genérico de crecimiento de la producción. 

“Por otro lado, es necesario preguntarnos: ¿quiénes son los países que más pronóstico de crecimiento tienen? y ¿hasta qué grado?”, argumenta. 

El economista se remitió a un artículo de BBC Mundo (https://www.bbc.com/mundo/noticias-40564067) que cita los pronósticos de crecimiento del Banco Mundial y enumera a las economías con mayor crecimiento anual pronosticado. 

El artículo de BBC Mundo coloca a Etiopía como el país con mayor crecimiento, que se pronostica un crecimiento del 8.3% anual a partir de inversión en infraestructura estatal, servicios y agricultura. 

El especialista señala que ninguno de los de la lista del artículo de la BBC está en un crecimiento por encima del 10%, lo que pone en evidencia un uso mal intencionado del dato. 

Explicó que en BCS la construcción se mantiene como la actividad con mayor valor y con el desarrollo inmobiliario al que hemos observado es coherente el volumen de producción. 

Esto es corroborado por el titular de la Subsecretaría de Economía del Estado, Alejandro Blanco, quien en entrevista confirmó que el crecimiento económico de BCS se debe al desarrollo y construcción de hoteles en el municipio de Los Cabos. 

En este contexto, el economista expone que la construcción acelerada puede ser anunciada positivamente en el discurso político. Sin embargo, otro tipo de preguntas se enmarcan en esta situación. 

“¿Qué tipo de empleos se están generando con este crecimiento de volumen físico? ¿La remuneración de estos empleos permite una buena condición de vida de los trabajadores? ¿El crecimiento acelerado que muestra la construcción no se contrapone con la capacidad de carga urbana/ambiental de las ciudades y la disposición de agua?”, cuestionó. 

“¿Estos empleos serán sostenidos en el largo plazo? ¿Seguirán siendo empleos serviles que generen nuevos cinturones de miseria? Esas preguntas, no son contestadas por indicadores a conveniencia y deberían ser pensadas en el largo plazo, más allá de un anuncio espurio”. 

Para el presidente de la Federación del Pacífico de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Fabricio González Rodríguez, el desarrollo económico del que habla el gobernador se traduce en una mayor generación de empleo y bienestar para los sudcalifornianos. 

El presidente aseguró que el gobierno de Carlos Mendoza modernizó BCS en tema de leyes que generaron confianza en los inversionistas. 

El líder empresarial cita Ley de competitividad, Ley de Asociaciones Público-Privadas, Ley Anticorrupción, enviadas por el gobierno del Estado al Congreso Local. 

“El sector privado somos los que generamos empleo, pero hay que reconocer que cuando los estados o los gobiernos coadyuvan para que se dé la relación entre los trabajadores y los patrones es el resultado que tenemos”, declaró Fabricio González. 

“Hay que reconocer el fomento por parte del gobierno y hay que reconocer que la confianza del sector empresarial está fundamentada en construir un estado de derecho. No hay un inversionista en el mundo que invierta en un lugar si no tiene 2 condiciones primarias: certeza jurídica y seguridad patrimonial”, recalcó. 

En contraste, la presidenta de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac), Lorena Hinojosa Olivas, difiere con respecto al tema del crecimiento económico de BCS. 

“Nos trasladamos a Los Cabos y vemos esos grandes desarrollos turísticos que, incluso, ni siquiera pagan impuestos en México. Son consorcios internacionales que, si bien vienen a generar empleo, se llevan toda la riqueza”, dijo Lorena Hinojosa. 

“Aquí no queda nada, más que la generación de empleo. Pero todo se va hacia otros destinos”, respondió. 

La presidenta de la Canirac señala que el 85% del empleo en BCS lo generan la micro, pequeñas y medianas empresas; el otro 15% lo generan las grandes empresas. 

“Ese 15% se lleva el dinero de nuestro Estado”, acusó Lorena Hinojosa.