La titular del INE resaltó que posiblemente la cultura sudcaliforniana no se encuentra preparada para trabajar y aceptar la participación política de las mujeres
La Paz, Baja California Sur.- Marina Garmendia Gómez Vocal ejecutiva de la junta local del Instituto Nacional Electoral (INE) resaltó que pese a que los números han sido favorables para el sector femenino dentro de los últimos movimientos de elección popular, resaltó que posiblemente la cultura sudcaliforniana no se encuentra preparada para trabajar y aceptar la participación política de las mujeres.
Comentando los avances y viendo los números de mujeres que ya obtienen cargos de representación popular, los cuales son más por primera para la media península, explicó que a pesar de ser mayoría legislativa, y tener dos cabeceras municipales, existe culturalmente mucha resistencia para aceptar la participación de las mujeres en la política.
"Se sigue considerando socialmente que quienes participamos en la función pública o directamente en la política, estamos dejando de lado el rol o el papel que se espera de nosotras en la familia, como esposas, madres o cuidadoras de adultos mayores, entonces esto hace que en esta participación, se ponga en duda la capacidad de las mujeres o bien, piensen que descuidamos lo que algunas personas consideran como que naturalmente nos corresponde", comentó a Diario El Independiente.
De esta manera explicó que de cierta forma esto no puede medirse en su totalidad, pues al preguntar a la ciudadanía el discurso político es el que impera pero en los hechos habría que evaluar, "yo lo pondría en duda, tenemos un avance numérico pero culturalmente, no hay tal grado de avance", donde acentúo que antes de cuestionar si las mujeres están preparadas para los cargos que obtuvieron, primero habría que analizar la preparación de los hombres que siempre han sido mayoría en la función pública.
Expresó que mundialmente este perspectiva trasciende como es el caso de Brasil y su candidato Jair Bolsonaro, el cual a pesar de expresa abiertamente posiciones contrarias a las mujeres y con un machismo muy grande; tiene un alto nivel de aceptación en un país donde impera la discriminación y la violencia hacia niñas y mujeres,
"Eso te habla de que tal vez muchas personas no lo dicen porque es políticamente incorrecto, pero en realidad sí están de acuerdo con ideas que pensamos que se habían superado en contra de las mujeres, pero sobre todo de su participación en la política de nuestro país y del mundo", concluyó.