La Paz, Baja California Sur.- Se descarta la extinción de la vaquita marina (Phoconea sinus) tras el avistamiento de ejemplares por un grupo de científicos en el Alto Golfo de California.

Los expertos que realizaron la expedición del 24 de septiembre al 4 de octubre pasados, pertenecen al Museo de la Ballena y Ciencias del Mar.

Documentaron en fotografía y video los hallazgos en colaboración con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quienes en su conjunto representan “los mejores científicos nacionales e internacionales en la materia”.

En una conferencia de prensa en la Ciudad de México (CDMX), mostraron los resultados de sus estudios y monitoreos; estimaron que restan al menos 30 ejemplares con vida.

Dijeron que estas son señales de esperanza para su recuperación, ya que en una expedición de 11 días, pudieron localizar ejemplares en etapa reproductiva:

El 25 de septiembre observaron a 2 ejemplares, una madre con su cría; El 27 de septiembre a otro par, que posiblemente eran dos adultos; y el 28 de septiembre, a un grupo de 4 a 6 animales, de los cuales uno era una cría.

Mostraron videos y fotografías con estos grupos de vaquitas en “excelente estado de salud”, de acuerdo al director general del Museo de la Ballena y Ciencias del Mar, Diego Ruiz Sabio.

Indicaron que todo apunta a que todos los avistamientos son de la misma agregación de vaquitas.

“Estos resultados son un aliciente para continuar con el programa de conservación de la especie y reforzar las acciones para impedir su desaparición”, aseguró Ruíz Sabio.

Para delimitar la zona de observación se utilizaron los registros del monitoreo acústico, que se realiza con los hidrófonos “C-Pods” en el polígono de la vaquita marina.

Estuvo presente el titular del Programa de Monitorización Acústica de vaquita marina del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), Armando Jaramillo Legorreta.

Reveló que este monitoreo constituye una herramienta elemental que permite detectar la presencia de este mamífero marino sin “estresarlo”.

Aseguró que es tal la precisión del sistema, que es posible ubicar ejemplares incluso antes de partir.

La expedición se realizó a bordo del buque “Narval”, propiedad del Museo de la Ballena, con el apoyo de 4 embarcaciones.

Hicieron un llamado al Gobierno de la República a mantener los esfuerzos para salvarla, así como a la próxima administración a dar seguimiento a estas acciones y fortalecerlas.

Dijeron que “eliminar los factores de estrés” que generan su muerte ayudará a su recuperación, ya que actualmente el 100 por ciento de sus muertes son a causa de redes de pesca, principalmente ilegal.

Se sumaron al llamado Nuria Sanz, directora de la UNESCO en México y Gabriela Sara Guzzy Arredondo, directora de Universum, Museo de las Ciencias.

También destacados científicos de la UNAM, como César Augusto Domínguez Pérez Tejada, director general de Divulgación de la Ciencia; William Lee Alardín, coordinador de la Investigación Científica, y Víctor Manuel Guillermo Sánchez Cordero Dávila, director del Instituto de Biología.

De igual manera Fernando Elorriaga Verplancken, presidente de la Sociedad Mexicana de Mastozoología Marina (Somemma) y académico del CICIMAR-IPN, y Enrique Sanjurjo, subdirector de Océanos de WWF México.