Estadio Maurice Dufrasne, Lieja.- Guillermo Ochoa estuvo a minutos de convertirse en el villano del Standard Lieja, tras un error cometido 10 minutos después de que su equipo se fue adelante en el marcador. Sin embargo, ya sobre el final del juego, dos de sus compañeros le salvaron la noche al darle la voltereta al marcador cerca del final del encuentro ante el Sint-Truidense.

El partido pintaba fácil para el equipo donde milita el arquero mexicano y aun más alentador cuando apenas al minuto 7, el jugador camerunés Fai Collins abrió el marcador.

Poco les duró el gusto, pues el portero mexicano regaló el balón en la salida en una jugada sin mayor complicación y la visita hizo el gol de la igualada ante la sorpresa de toda la afición.

Ochoa tomó la pelota, la manejó con los pies y se abrió hacia un costado del área grande, luego buscó un compañero desmarcado y cuando despejó, el servició le cayó a Roman Bezus, quien sin pensarlo y con el marco abierto, sacó un disparo fuerte que se coló en las redes locales al minuto 17.

En la parte complementaria, Memo intentó salvar el error con dos grandes atajadas, sin embargo, no pudo evitar que al minuto 69 Yohan Boli hiciera el segundo tanto del Sint-Truidense, con el cual se acercaba la primera caída en la Liga para su equipo.

Cuando el partido entró a la recta final, aparecieron Christian Luyindama y Renaud Emond para convertirse en los héroes del Standard, haciendo los goles del empate al minuto 80 y el de la victoria ya cuando se jugaba el tiempo de compensación.

A falta de que se jueguen otros duelos, el triunfo puso al equipo rojiblanco en segundo lugar de la clasificación con 11 puntos a uno solamente del Anderlecht, que lidera la competencia.