Francisco Javier Arce Arce dijo que hay pláticas con los pescadores para unificar criterios ante las próximas restricciones comerciales
La Paz, Baja California Sur. -Existe incertidumbre entre los pescadores de Baja California Sur (BCS) por las posibles restricciones para exportar su producto a Estados Unidos (EEUU).
Así lo reconoció el diputado Francisco Javier Arce Arce, presidente de la Comisión de Pesca del Congreso de BCS.
El legislador informó de próximas reuniones con el sector productivo en la zona Pacífico Norte, en los municipios de Comondú y Mulegé, para unificar sus criterios.
Esto después de que la Corte Internacional de Comercio de Estados Unidos (EEUU) ordenó prohibir la importación de productos marinos mexicanos de empresas que usan redes “agalleras” en el Alto Golfo de California.
Como un esfuerzo de conservación para la vaquita marina, cetáceo en peligro de extinción, se prohibieron productos como: camarón, corvina (pez tambor), sierra (caballa española) y chano (o patudo) de la zona, obtenido a través de redes de enmalle o “agalleras”.
Hasta el momento, el gobierno estadounidense no ha emitido ninguna postura o dictamen definitivo ni se ha informado al gobierno mexicano sobre los alcances de la medida.
“Sobre todo es difícil identificar de donde viene el producto, hasta el momento no existe una resolución oficial pero entre las cooperativas, tienen mucha polémica”, dijo el diputado Arce.
“Sobre todo pescadores de la Pacífico Norte, se nos complica lo que dicen los americanos, porque nuestra corvina ¿cómo van a saber que no viene el alto golfo?” cuestionó además.
Organizaciones civiles de EEUU señalan que este tipo de redes para captura de la totoaba, son causantes del declive de la vaquita marina, ya que estas cuelgan en el agua y “atrapan indiscriminadamente tanto a los peces objetivo como a otras criaturas marinas”.
En 2017 las autoridades mexicanas reportaron 32 avistamientos de estos animales, pero la organización que presentó la demanda calcula que sólo hay 15 vivas y señala que podría extinguirse para 2021.
“Con las vaquitas al borde de la extinción, estas sanciones económicas son dolorosas pero necesarias para presionar a los funcionarios mexicanos”, añadió Sarah Uhlemann, directora de programas internacionales del Centro para la Diversidad Biológica y criticó que “durante 20 años, el gobierno mexicano prometió salvar a la vaquita, pero no tomó medidas significativas”.
La corte determinó “una medida cautelar que requiere que el gobierno, en espera de la adjudicación final de los méritos, prohíba la importación de todos los pescados y productos marinos de las pesquerías comerciales mexicanas que usan redes agalleras dentro del rango de la vaquita”.
Para Giulia Good Stefani, abogada del Consejo de Defensa de Recursos Naturales que presentó el caso ante la corte estadounidense, esta decisión es “la línea de vida que la vaquita necesita desesperadamente”.