El grupo, creado en 2002 en Nueva York, ofreció al público del festival Sónar un repertorio en el que han repasado su larga trayectoria
BARCELONA,
LCD Soundsystem ha aplicado esta noche en el escenario principal de Fira Gran Vía de Barcelona su receta infalible para poner a bailar a todo el público del Sónar: una mezcla de la contundencia que tiene una banda de rock en directo y el sonido infeccioso de los sintetizadores y 'beats' de discoteca.
La banda, formada por Nancy Whang (teclado y sintetizador), Pat Mahoney (batería), Gavin Rayna Russom (sintetizador), Tyler Pope (bajo), Al Doyle y Matt Thornley (guitarras), Korey Richey (percusión) y comandada por James Murphy (voz), ha desatado esta noche su sonido fiestero en todas y cada una de sus canciones.
El grupo, creado en 2002 en Nueva York ofreció al público barcelonés un repertorio en el que han repasado su larga trayectoria y que ha puesto a saltar a todos los asistentes al festival con grandes éxitos como I can change, Dance Yrself Clean y Yeah, que han sido de los más coreados de la noche.
Pero LCD Soundsystem también ha mostrado, aunque en menor medida, algunos de sus temas más recientes, como Call the Police y Tonite, que forman parte de su último trabajo de estudio, "American Dream" (2017), que supuso el regreso a los escenarios de la banda tras una breve separación, que duró entre 2011 y 2015.
A sus 48 años, Murphy no ha dado muestras de cansancio, ni siquiera teniendo en cuenta que estos últimos tres días ha estado ejerciendo de DJ durante seis horas seguidas en cada una de las jornadas diurnas del festival junto al dúo 2manydjs.
El 'frontman' ha mantenido su característica manera de andar por el escenario, prácticamente abrazando el micrófono y llegando en algunos momentos a dar la espalda al público, cantando como si fuera lo último que le queda por hacer en esta vida y poniendo a prueba su registro vocal en los momentos más álgidos de la velada.
La banda ha hecho alarde de la multinstrumentalidad de prácticamente todos sus miembros, con momentos en los que ha habido hasta cuatro personas tocando percusiones (entre ellos Murphy), y ha demostrado que no hace falta tener una mesa de mezcla para generar 'beats' potentes y discotequeros.
La versatilidad de Whang frente a los sintetizadores y teclados, la contundencia del bajo de Pope y los 'riffs' de guitarra de Doyle han hecho que el público se olvidara por momentos que estaban delante de una banda de rock alternativo y bailasen como si estuviesen en una discoteca.
LCD Soundsystem ha cerrado el concierto por todo lo alto con una de sus canciones más aclamadas, "All my friends", que ha mantenido el pulso después de casi dos horas seguidas de espectáculo, en el que no hubo 'bises' ni ningún momento de descanso para la banda.