Cabo San Lucas, Baja California Sur.- El fraccionamiento Chulavista, construído hace más de diez años por la empresa Homex, y el cual ha sido marco de señalamientos por su mala edificación y posibilidad de riesgo para quienes ahí viven, se encuentra prácticamente a un costado del paso de un arroyo pluvial, además de no contar prácticamente con vialidades de concreto o asfalto que lo conecten con la mancha urbana. 

Por la naturaleza de su ubicación, en las horas de mayor afluencia vial, el fraccionamiento de más de diez edificios de cuatro pisos, así como viviendas de una planta, quedan literal en medio de nubes de polvo, que se levantan con el paso de vehículos. 

Ante esta situación, vecinos de la zona desconocen si estos sedimentos pudieran afectar su salud, “Todos los días tenemos que caminar en medio del polvo para llevar a los niños a la escuela, no queda de otra, solo nos tapamos un poco pero ya los niños tienen tos y se lastiman su garganta”, opinó la señora Enedina Fuentes, quien vive en los edificios de Chulavista”. 

“Ya se ha pedido a la delegación que vengan a regar las calles más seguido, hay mucha tierra y está toda seca por eso se levanta, uno anda ahí en medio del polvo tragando quien sabe qué cosa”, dijo el señor Everardo Ramírez, quien trabaja en un hotel y debe caminar hasta la calle Nicolás Tamaral a tomar el transporte público. 

Por si fuera poco, se encuentra maquinaria en el lugar trabajando en la construcción del encauzamiento del arroyo que se ubica entre la zona escolar y las viviendas, lo que le suma a que se levanta más polvo y provoque la nula visibilidad durante las mañanas, por lo que vecinos piden la intervención de la autoridad para que garantice que el polvo, no esté afectando la integridad de su salud y sus familias.