La Paz, Baja California Sur.- Luego de que esta mañana se destapara la salida de Socorro García Castro del Partido Revolucionario Institucional (PRI) por ser un partido de políticas excluyentes para las mujeres, Lupita "la güerita" Munguía señaló al Diario El Independiente que esta situación ya la venía señalando desde hace meses.

"Lamento decir que tenía razón, porque lo hemos sufrido no solo de un mes atrás, en mi caso han sido 15 años de aguantar vara", comentó a este matutino después de postularse en el Partido Nueva Alianza (Panal) para el senado de la República en primera fórmula, tras denunciar que después de militar desde su juventud en el PRI, no se le permitió postularse a ningún cargo en estas elecciones.

La candidata al senado por Alianza recalcó que los políticos priistas en Baja California Sur (BCS) dicen de "dientes para afuera" que las mujeres merecen todo por ser capaces pero al final - dijo al Diario - no se les respeta desde el momento en que se les cierran los espacios para competir, "somos mucho mejores que ellos", comentó.

En este sentido Munguía recalcó que han salido mujeres muy valiosas del PRI que son parte de sus grandes amistades y a las cuales aprecia, pero lamentó que aún muchas de ellas se encuentren en el tricolor esperando que el milagro suceda, asegurando que son ellas las que deben de ir en busca de sus propias oportunidades, pues en el PRI no recibirán lo que merecen.

Durante la semana pasada Fernanda Villareal líder estatal de la Organización Nacional de Mujeres del PRI (ONMPRI) quien también denunció en rueda de prensa la injusticia por la que ella y varias mujeres de la militancia tricolor han sido objeto, pues subrayó que la violencia política de género está golpeando a quienes buscan espacios en este partido, beneficiando solo Ricardo Barroso, Esthela Ponce e Isaías González.

Por su parte Socorro García Castro señaló mediante un documento que las políticas priistas en el estado son parasitarias, excluyentes y simuladores, donde no se permiten nuevos perfiles y donde las candidaturas de las mujeres son un montaje, pues asegura que las candidatas están siendo sacrificadas por puestos que no van a ganar, mientras que los mejores cargos ya se encuentran asegurados a una misma minoría.