· Concluye plazo para candidaturas comunes y Morena aún resiente los chantajes de Agúndez Montaño, Alfredo Porras y Víctor Castro · Frustración y desesperación de Ernesto Ibarra por la dificultad para fusionar candidaturas del PT y Morena en Los Cabos · Se fortalece la posibilidad de que el alcalde Arturo De la Rosa sea reelecto en Los Cabos
Par este fin de semana deben
estar concluidas y registradas las listas definitivas de las candidaturas en común
que a nivel local tendrán los diversos partidos que existen en la entidad y
hasta ahora los que más problemas han tenido para definir sus abanderados son
los integrantes de Morena, que hasta el cierre de esa edición aún no definían
sus propuestas para los municipios de La Paz y Los Cabos.
Desde luego que esta situación
de los integrantes del partido de López Obrador, no es exclusiva de Baja California
Sur ya que en diversas entidades del país esta problemática también la registran
los comités estatales ante las fuertes diferencias que existen entre los grupos
políticos locales.
Dese la dificultad para aceptar
candidaturas provenientes de PT y del PES, en Morena además existen diferencias
entre los propios integrantes de este partido, como es el caso sudcaliforniano
donde Víctor Castro, hoy candidato al Senado, no termina por aceptar que el
dirigente estatal Alberto Rentería, tiene una representación partidista bien
respetada y respaldada por el candidato presidencial López Obrador.
Pero además de esta circunstancia,
que no es menor, Morena en la media península ha tenido que enfrentar los embates
y chantajes del grupo político que encabeza el desacreditado Narciso Agúndez
que a través del PT y de Alfredo Porras insisten aún en definir candidaturas comunes
donde los intereses de este vapulead grupo político pueda quedar a salvo.
Dicho de otra manera, Narciso Agúndez
con Alfredo Porras y el propio Víctor Castro tratan a toda costa de que las candidaturas
a las alcaldías de La Paz y Los Cabos
sean encabezadas por propuestas que de alguna manera simbolizan sus respectivos
esfuerzos cargados de una inmensa sed de venganza por regresar al poder, entre los
que se encuentra por supuesto Ernesto Ibarra quien ahora como candidato a la
alcaldía de Los Cabos por el PT intenta forzar el apoyo de Morena y evitar que
ese partido no coloque como candidata a una mujer tal como se ha señalado por
la dirigencia estatal de este organismo político en voz del propio Alberto
Rentería.
Sin embargo, también en el
Partido Verde por instrucciones de este mismo grupo político se descuadra con
la idea de Mandar una señal de un supuesto poderío y capacidad de convocatoria
ciudadana que solo existe en la mente de estos ambiciosos políticos cabeños que
ya muestran verdaderos signos de desesperación ante la evidente incapacidad para
dar la pelea electoral con posibilidades reales de triunfo.
Incluso se han tratado de
valer de burdas artimañas con el objetivo de desacreditar sin éxito por cierto,
las acciones de alcalde cabeño, Arturo De
la Rosa quien está claro que su reelección es sumamente factible.
Esa factibilidad de que Arturo
De la Ros gane la reelección como presidente municipal de Los Cabos está centrada
fundamentalmente en dos razones:
La primera, es que hasta ahora
y a pesar de los rezagos que pudieran existir, Arturo De la Rosa, ha dado buenos
resultados a los cabeños en la parte administrativa de los recursos financieros
y en la parte operativa con atención a los diversos servicios púbicos como la
seguridad, el alumbrado y por supuesto la limpieza de las comunidades.
La segunda razón, es que hasta
ahora no se pudo conformar una propuesta política de oposición al PAN realmente
convincente que pueda generar expectativa de competencia y de triunfo electoral
adverso a la alcaldía que encabeza De la Rosa Escalante.
En ocas palabras no hay
condiciones para que Agúndez Montaño y sus engañados e ingenuos seguidores
puedan aspirar a ganar las próximas elecciones.
Por ello la evidente desesperación
de Narciso Agúndez Montaño y de Alfredo Porras que siguen insistiendo en ser amparados
por la figura de Morena a través de las candidaturas del PT. Maniobra que a
estas alturas del proceso esperaban tenerla ya superada, pero el plan no ha
resultado.
Veremos qué sucede en las próximas
horas donde hasta ahora por su parte el resto de los partidos de oposición a
Acción Nacional, como el PRI, por ejemplo, se muestran un tanto fríos y desangelados
ante un a panorama de enorme complejidad electoral.
Mientras esto sucede los candidatos
a las senadurías y diputaciones federales ya están a punto de completar su primera
semana de campaña formal en donde hasta ahora el PAN aún conserva la
expectativa de triunfo electoral que sus adversarios pretenden modificar
precisamente a través de sus respectivas actividades proselitistas.
Así que aún habrá mucho que
ver en este proceso electoral que aunque apenas inició formalmente su campaña,
ya cumplió seis meses en el ánimo de la población a través de las llamadas precampañas
e intercampañas, aunque queda claro que aún no hay nada para nadie.
Veremos cómo se cerrará el
trabajo electoral esta primera semana de campaña formal a nivel federal que sin
duda impactaran de manera trascendental en la búsqueda del voto a nivel local.
Ya veremos cómo se las
arreglan los agudos estrategas del proselitismo electoral local.