LOS ÁNGELES

La ciudad de Westminster, en el condado de Orange, se sumó a la lucha contra la llamada ley santuario del estado de California.

Aprobaron una resolución en su sesión del concilio, reportaron este jueves autoridades locales.

En una votación de 3-1, el Concejo Municipal de Westminster decidió desafiar la ley en una audiencia dividida con oradores a favor y en contra, así como una decena de seguidores del presidente Donald Trump que pese a no ser residentes de la ciudad asisten a todas las audiencias para condenar la política santuario.

La decisión se produce después de que varias ciudades del condado de Orange, como Huntington Beach, Los Alamitos y Newport Beach, votaron a favor de la demanda federal presentada contra California.

El gobierno federal está demandando al estado por la ley que limita la cooperación de las autoridades estatales y locales con los funcionarios federales de inmigración.

Después de una larga y acalorada reunión, el Concejo Municipal de Westminster decidió este miércoles unirse a un creciente número de ciudades del condado de Orange para hacer una declaración en contra de la ley de santuario de California.

El alcalde Tri Ta y los concejales Tyler Diep y Margie Rice votaron a favor de apoyar la demanda de otra ciudad contra el estado. El concejal Sergio Contreras se opuso, mientras que la concejala Kimberly Ho estuvo ausente.

Al final, se decidieron por una resolución que apoyaba la querella de otra ciudad, presumiblemente la que Huntington Beach aprobó recientemente.

Funcionarios elegidos en Orange y Newport Beach votaron esta semana resoluciones que se oponen a la nueva ley de California, que limita la cooperación entre agentes de inmigración federales y la policía local y proporciona protección a inmigrantes no autorizados en escuelas públicas, bibliotecas y centros médicos.

Otras ciudades del condado de Orange que han realizado movimientos opuestos a la ley del santuario incluyen Los Alamitos, Mission Viejo, Yorba Linda, Aliso Viejo, Fountain Valley y San Juan Capistrano.

Frente a la Cámara del Consejo de Westminster, la audiencia fue seguida por unas 75 personas que provienen de todo el estado para asistir a casi todas las reuniones de los concejos del condado de Orange, empujando a las ciudades a desafiar la ley de santuario de California.