• Los senadores Emilio Gamboa y Jorge Luis Lavalle aseguraron que las inversiones comprometidas equivalen a 68% de los ingresos totales del país
CIUDAD DE MÉXICO.-La
corrupción no podrá tocar los contratos comprometidos a raíz de la Reforma
Energética debido a que están sujetos a un proceso de transparencia y revisión
colegiadas, aseguraron los senadores Emilio Gamboa y Jorge Luis Lavalle.
El monto de las inversiones
por convenios petroleros asciende a 3.6 billones de pesos, equivalentes a
68.18% de los ingresos totales del país en este año. El priista Emilio Gamboa
destacó que la reforma ya propició la creación de 3.5 millones de empleos.
Jorge Luis Lavalle explicó que
“sería catastrófico (cancelarla); uno de los elementos que provoca confianza
(...) es que implica una reforma constitucional y 22 leyes”.
“Contratos petroleros, a salvo
de corrupción”
Afirman que cancelarlos
implicaría un “castigo económico multimillonario”; equivalen al 68% de ingresos
en el país.
Los contratos firmados a raíz
de la Reforma Energética, que comprometen inversiones por 3.6 billones de
pesos, equivalentes a 68.18% de los ingresos totales del país en este año,
están protegidos contra la corrupción, porque todo su proceso se sujeta a
transparencia y revisión colegiadas; cancelarlos implicará un “castigo
económico multimillonario” para el país, advirtieron los senadores Emilio
Gamboa y Jorge Luis Lavalle.
Además, la suspensión de esos
contratos atentará contra la certeza jurídica de la nación y sembrará una
alarmante desconfianza internacional, dijeron los senadores del PRI y el PAN.
Emilio Gamboa recordó que no
es tan sencillo revertir la Reforma Energética, porque “ya no se puede echar
para atrás por ningún decreto. Tendría que pasar por el Congreso y veremos qué
va a pasar el primero de julio”.
Emilio Gamboa y Jorge Luis
Lavalle, dos de los ocho legisladores federales que entre 2013 y 2014 diseñaron
la Reforma Energética junto con el gobierno de Enrique Peña Nieto, lamentaron
que la pugna electoral en México genere inquietudes sobre una industria exitosa
para el futuro del país.
Tan sólo los contratos
logrados hasta el momento significan una proyección de inversión hacia México
de 200 mil millones de dólares, equivalentes a 3.6 billones de pesos actuales y
cuya dimensión es similar al 68.18% de los ingresos totales de México en este
año, que están previstos en cinco billones 279 mil 667 millones de pesos.
En entrevista con Excélsior,
Jorge Luis Lavalle explicó que la pulcritud de los contratos diseñados en la
Reforma Energética genera tanta seguridad jurídica a los inversionistas que por
eso apuestan 200 mil millones de dólares al futuro.
“La Reforma Energética no es
un capricho del gobierno, como algunos dicen. Fue un paso importante por el
cual transitamos de un modelo total y completamente cerrado hacia un modelo
abierto, en el que se generaron los diferentes mecanismos e instrumentos no
sólo en transparencia y mejores contrapesos; por eso tenemos hoy reguladores,
que son los responsables, bajo varios criterios de autonomía, de dar la mayor
certidumbre y certeza a todos los que participan. No es el gobierno quien
decide quién se queda o no con una licitación o a quién se le invita a
participar”, explicó el senador panista.
Interrogado sobre las
consecuencias de cancelar los contratos ya pactados, explicó que “serían
catastróficos; uno de los elementos que provoca confianza para invertir 200 mil
millones de dólares es que implica una reforma constitucional y 22 leyes;
pensar que se puede echar atrás muestra el desconocimiento.
“Pero si se llegara a cometer
una locura, como querer cancelar todo, habría repercusiones económicas para el
país; las cortes comerciales seguro dictarían una especie de castigo económico
contra quien decida de manera unilateral cancelar todo un modelo energético”.
Emilio Gamboa destacó que a
pesar de que la Reforma Energética todavía no ha desplegado todo su potencial,
ya propició la creación de 3.5 millones de empleos, amén de que se creó un
modelo energético “competitivo, limpio, ordenado y transparente”.
Lamentó que la Reforma
Energética y su contribución al bienestar nacional sea tema de debate político,
porque se trata de un asunto muy serio que no se debe abordar a la ligera.
Destacó que para los senadores
del PRI, dar marcha atrás a la Reforma Energética atenta contra la certeza
jurídica de la nación y siembra una alarmante desconfianza hacia México entre
los inversionistas nacionales y extranjeros.
Y explicó que los senadores
priistas decidieron dejar atrás las viejas resistencias, convencidos que la
apertura al sector privado en la industria energética es lo mejor para el país
y los mexicanos, que siguen siendo los únicos dueños del petróleo; los
priistas, dijo, están convencidos de que el único que tiene la capacidad, el
talento y experiencia para fortalecer al sector energético es José Antonio
Meade.