Gilberto Santisteban Flores/ Alinne Mekler 

La Paz, Baja California Sur.- Luego del motín que se registró en el interior del Centro de Reinserción Social (Cereso) de La Paz, las manifestaciones por parte de familiares de los reos continuaron en las afueras de la penitenciaria de la capital. 

Tras las exigencias de los familiares de los internos, diversos medios de comunicación arribaron al penal para dar voz a quienes pedían a las autoridades que los dejaran ver a los reos luego del motín del sábado que dejó 3 lesionados. Entre los heridos se encontraba el director del Cereso, Andrés Chávez Martínez. 

Ante el micrófono de diversos medios de comunicación, desde el interior del penal un reo logró realizar una llamada telefónica. El interno dio testimonio de la experiencia que tuvo tras el disturbio que provocó una gran movilización policiaca en la penitenciaría. 

En la llamada telefónica, el reo confirmó que el motín comenzó debido a los supuestos abusos que dice han vivido desde la llegada de Andrés Chávez a la dirección del penal. 

Entre los abusos, el recluso denunció que el director les solicitaba cuotas de mil pesos para protección y privilegios dentro del Cereso. Este pago debía realizarlo la familia de cada interno a una cuenta de banco, según su testimonio. 

“Lo de la cuota comenzó en el área de mujeres. Varios reos han pagado la cuota a través de una cuenta de banco, el comisario de los Ceresos hostiga a las familias de los internos para que se pague la cuota”, dijo el reo. 

Tras reconocer que rompió el reglamento de la penitenciaría consiguiendo un celular para realizar la llamada, el recluso continúo explicando que la agresión en contra del director se reportó cuando este daba un recorrido por el penal y no en el área de Dirección. 

“El señor realizaba un recorrido y fue cuando la gente inconforme comenzó a manifestarse, fuimos recibidos con disparos de armas de fuego. Nunca fue en la dirección, fue en el pasillo principal donde se inició en la riña con el director”, aseguró. 

El conflicto dentro del Cereso continúo por lo menos hasta la mañana de este lunes. El interno acusó que un grupo antimotines les arrojó gas lacrimógeno el día de ayer y siguen encerrados en sus celdas. 

Asimismo, el recluso acusa que en el último operativo se llevaron todas las pertenencias de los internos. 

“Queremos un trato digno, que dejen pasar a visita a nuestros familiares. Que se nos dé la oportunidad a trabajar, es parte de la reinserción de este lugar; no que nos tengan reprimidos. Ninguna autoridad se ha acercado, sólo hemos recibido amenazas de que nos trasladará a otros penales del país”, señaló el interno. 

“Sé que estamos pagando una condena, pero no tienen derecho a tratarnos como perros”, agregó. 

Mientras tanto, en las afueras del Cereso los familiares de los reclusos se manifestaban para exigir que se les permitieran ver a los reos. 

El domingo por la mañana, padres, hermanos, madres e hijos de los reclusos llegaron con el objetivo de constatar el estado de sus familiares. A pesar de la insistencia, no fue hasta el lunes cuando les permitieron tener acceso a los locutorios. 

“Están dejando pasar de 2 en 2 y sólo 5 minutos por el locutorio”, daba testimonio la madre de un interno. 

“Mi hijo padece de epilepsia, hasta hoy me permitieron entrar al locutorio”, señalaba otra madre a los micrófonos de Diario El Independiente. 

Ante el conflicto que estalló dentro de la penitenciaría, los familiares de los internos pidieron la renuncia de los directivos del Cereso. 

Por su parte, el diputado (con licencia) del Partido del Trabajo (PT) y presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Congreso del Estado, Camilo Torres Mejía, arribó al lugar de los hechos para buscar contactar a las autoridades correspondientes y agilizar las visitas dentro del penal. 

“Estuvo esto cercado de una manera extraordinaria, no se podía pasar. Queremos buscar el mecanismo para que los familiares tengan información y tratar de buscar una solución a esta bronca. Lo que ha sucedido es la falta de información, entra un problema de especulación y esconder situaciones que se están dando dentro”, declaró Torres Mejía. 

Este lunes, la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) recalcó que luego de un exhaustivo recorrido de tres horas por el Cereso, pudieron verificar que los internos se encuentran estables en este momento. 

La visitadora de la CEDH Lizeth Collins Collins comentó a Diario El Independiente, que la noche de los disturbios se trasladó al lugar para verificar las circunstancias en las que se estaba desenvolviendo dicha situación, por lo que dijo tener un acercamiento con las autoridades penitenciarias para establecer una serie de visitas en favor de los internos y sus familiares. 

La CEDH envió un equipo de trabajo para verificar las condiciones de los internos, por lo cual Collins Collins afirmó que en la revisión no se encontró a ninguna persona amarrada o golpeada salvo a quienes fueron atacados. Por otra parte, la representante de Derechos Humanos constató que sí recibieron algunas quejas de los reos asegurando que se atenderán paulatinamente. 

"En lo que respecta a su salud y su integridad están bien, nos están pidiendo medicamentos y nos hicieron saber algunas quejas que iremos atendiendo. En términos generales la atención están bien, el agua y los alimentos están garantizados y su integridad no está en peligro", confirmó Collins Collins. 

En lo que respecta a las quejas emitidas por los familiares de los reos, la CEDH recalcó que recibirá toda la documentación para atenderlos consecutivamente. 

Por lo tanto y ante los hechos se espera que en el transcurso de esta mañana el personal de la CEDH pueda volver a emitir información de la nueva visita que se efectúe para constatar que la situación interna del centro es óptima para quienes trabajan y están recluidos.