Sobre temas electorales algunos periodistas hemos estado publicando nuestras opiniones y puntos de vista, cada quien a su estilo y manera, de mi parte, he considerado mucho la participación ciudadana y por supuesto de las analistas más experimentados, aunado todo ello, por supuesto, a mis propios análisis, temática que incrementé cuando ya se vio venir el primer debate presidencial sobre todo, (que el de la CDMX casi no lo he tocado, pa´qué…, importante sí, pero es otro ámbito, que lo hagan otros “más cerquitas” de ese escenario).

Recuerdo por ejemplo que manejé de la importancia que revestía para la definición del triunfo en la elección presidencial de 2018 la figura de Los indecisos…¿por qué? ¿en quién influye más un debate de este nivel EN LAS ACTUALES CIRCUNSTANCIAS COMO NACIÓN?, con los riesgos o aciertos que este produce, en este sentido yo pienso que los debates en sí, a muchos nos servirá este primero y también los tres pero SOBRE TODO A LOS INDECISOS; ¿qué están (mos) esperando que pase este primer debate sobre todo para mayor información o…que nos desinformen o los desinformen?; porque quizá estos-los indecisos-de cualquier edad, ¿eh?, en especial los milenians, los jóvenes, quienes pudieran decidir la elección, ¿por qué?, pues para comenzar porque son muchos más: 60% se calculan y sólo el 30% son votos partidistas de base, o los llamados duros, o de los independientes que están definidos. Por lo tanto váyanse los candidatos todos en estos tres debates y lo que les resta de campañas, a convencer a este importante núcleo de sufragantes, los indecisos, los jóvenes y los mexicanos extranjeros. (Meade le dedicó demás tiempo a los de base del PRI, tiempo perdido…pa´qué si ya eran tuyos, ¿o no?).

Ahora bien. por qué a estas alturas de campañas y ya el debate no han subido mucho ni Anaya (23 puntos, ni Meade (18 pts, ni Margarita y el Bronco, (3 y 2 pts) y AMLO no sólo los está esperando sino que él sí subió (hay encuestas que dicen que hasta a 45 pts). ¿Qué está pasando aquí?.

Bueno, digo, veamos lo siguiente: ¿el primer debate de este 22 de abril y los dos que le siguen podrán cambiar este panorama?, chequemos el análisis al respecto…

Partiendo de lo que según le capté en parte a un conocedor (Jose A. Rondero), hay cuatro tipos de electores: el leal, que vota por su partido siempre; el voto switcher, qué es el que va cambiando según como le va en la feria; el antipartidista, el que nunca votaría por uno, es decir, votaría por el que fuera, menos por un partido en especial (por ejemplo ahora se ve que hay mucho antiprian), y cuarto, la abstención que es una decisión final... Y por otra parte, los militares fuera de sus funciones tienen el mismo derecho a ejercer el sufragio libre cómo cualquier ciudadano, además secreto.

*Ahora bien, aunque este tema lo inicié un día antes de este debate, vale decir lo que de antemano escribí basándome en diversas informaciones sobre éste para ir analizando cómo podría ser el papel de los candidatos en este encuentro; lo pongo hoy como un ejercicio de mi parte con un método de comparatividad y, según el debate en sí, (que ya ocurrió anteayer) ir previendo lo que sigue y su culminación el 1 de julio.

* LO QUE CAPTÉ DE ALGUNOS ESPECIALISTAS EL SÁBADO 21 EN MESA DE ANÁLISIS POR TELE.

Me interesó porque se trata de verdaderos conocedores del panorama político electoral de México y de otras partes: Roy Campos, director general de Consulta Mitofsky; el analista Gabriel Guerra y

el publicista Carlos Alazraki, quienes hablaron en Despierta con Loret del primer debate presidencial, y

analizaron cómo podría ser el papel de los candidatos en este encuentro. Así, los invitados coincidieron en que Ricardo Anaya, Margarita Zavala, José Antonio Meade y Jaime Rodríguez ‘El Bronco’ tratarán de “sacar de sus casillas” a Andrés Manuel López Obrador. Que habrá golpes bajos, una posible revelación de documentos y sorpresas de ‘El Bronco’ por su forma de hablar, aunque no alteraría “la sustancia de la competencia”. (Y en general así sucedió, fue mi percepción, y ya ven en cuanto al Bronco que propuso mocharle las manos a los ladrones). Enseguida voy a colocar algunos fragmentos esenciales de ellos, y mi comentario. *Roy Campos, le sugirió a López Obrador no cambiar su forma de ser durante el debate, contestar todo, pero no enojarse, es decir “no dejar pasar ninguna” e incluso “regalar alguna ocurrencia”. (Aquí, y ya en el pos debate, según yo, a los asesores se les pasó la mano, pues “sí dejó pasar algunas” que merecían contundencia en su contestación, ya no digo en el tema de “su amnistía” pues ésta al igual que otras de los diferentes candidatos, no tienen una coherente explicación o no tienen sustento y entonces, confunden.), pero sí otras, por ejemplo como la simplista de sus departamentos, que le inquirió J.A. Meade; que a esto Amlo hubiera aceptado el cuestionamiento de éste, diciéndole simplemente: sí, tenía 3 pero uno se lo di a “mijo” ¿y…? y los otros dos, no te fijes, tenía derecho a adquirlos, ¿o no?, como cualquier mexicano; pero eso, como “la renta de aquella avioneta”, no es nada ni es delictivo comparado con otros grandísimos bienes de tus amigos, como las casas blancas y otros); pero no, AMLO mejor los negó y los apostaron (una absurda tontería de los dos), todo porque sus asesores le dijeron que no fuera contestatario; álgame dio. Sigo con los otros…

*Carlos Alazraki coincidió y recomendó a López Obrador no enojarse, pues lo van a tratar de sacar de sus casillas y si esto sucede volverá a ser “el clásico Andrés Manuel”. Le sugirió mentir un poco y crear historias de un futuro maravilloso y “todo te va a ir muy bien”. (Cuánta ironía de Alazraki, ¿verdad?.)

Gabriel Guerra recomendó al candidato puntero en las encuestas volver a ser el mismo de hace mes y medio, cuando estaba en un tono muy apacible, muy cordial, muy invitador al diálogo, y antes de que entrara a esta fase como de choque y confrontación, y ocurrencias fallidas. “Creo que ha ido entrando otra vez en ruta de choque y confrontación”, consideró al analista y sugirió al candidato “regresar el reloj, se acordará que no la tiene ganada, aunque lleva la gran ventaja”. (Ciertamente la soberbia no le ayuda a nadie, pero señalar, defenderse o callar no es soberbia, así es que…Ahora bien, ESE EXCESO DE CONFIANZA a veces lleva a los candidatos a cometer ese tipo de errores, como ahora AMLO).

* Y…¿QUIÉN GANÓ?, ¿EL QUE MÁS PEGÓ, GOLPEO?, O QUIEN TUVO MÁS VERBO, RETÓRICA?, NO.

No señores, aquí en este tipo y nivel de debates no se trata de una carrera de caballos o jugada de gallos (ganó y perdió!, grita el juez), ni funciona “el que traga más saliva come más pinole” (gana); ni un debate se mide en sólo estos tres elementos: el oral, el retórico y el mediático…aquí lo que cuenta es ir convenciendo con información de verdad y despertar a los indecisos y/o a los que buscan cambiarse de partidos o “Frentes”, a la ciudadanía pues, pero sí, bien que podemos decir quién estuvo más convincente, mejor, aquel/lla que presentó esas propuestas que tanto hemos dicho. Veamos este fragmento al respecto, que escribí recientemente: “La función primordial de la mercadotecnia política es convertir propuestas en oportunidades para mejorar la calidad de vida de la sociedad”. La propuesta o plataforma política es la oferta que cada partido y su candidato hace al electorado en busca de conseguir su preferencia, afianzar la simpatía e intención de voto. La propuesta política debe ser congruente con las intenciones de gobierno QUE SE DEBEN BASAR EN LA REALIDAD QUE SE ESTÁ VIVIENDO en lo económico, político y social; en la problemática general y específica de la sociedad o comunidad de que se trate.  Sin embargo cuando las campañas caen en sólo promesas irresponsables o de simplemente cuestionar las propuestas del adversario, no les servirán….hoy mismo”. Buenos días.