La pareja de caninos, tuvieron una segunda oportunidad de vida al ser adoptados por la comunidad estudiantil
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Cabo San Lucas, Baja California Sur (BCS).- Con la intención de ayudar en la seguridad de su escuela, la comunidad escolar de la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS), Campus Los Cabos, cuenta con dos guardianes caninos, que todas las noches religiosamente, patrullan las instalaciones avisando a los veladores, si alguna persona, intenta ingresar al plantel.
Sin embargo, estos singulares perros, no son el típico can adiestrado, con pedigree y múltiples condecoraciones, son dos animales adoptados por estudiantes y maestros, ellos son “Julieta y Huesos”.
En entrevista con Diario El Independiente, la profesora Margarita Alvarado platicó un poco de la historia de los “guardianes en cuatro patas” por orden de llegada, pues primero fue “Julieta”, quien acompañada de su “Romeo”, deambulaban por el plantel, ganándose el cariño de todos.
“No empezó como un proyecto dirigido, Julieta llegó con otro perrito que lo bautizamos como Romeo porque siempre andaban juntos, eran dos perritos que tenían dueño pero estaban descuidados, tenían cáncer. Llegaron y se metieron al campus y unos alumnos los empezaron a conocer”.
Sin embargo, “Romeo” fue regresado a su propietario, no así “Julieta”, que fue prácticamente abandonada enferma y desnutrida por su antigua familia.
“Nosotros tenemos una comunidad de alumnos que está preocupada por los animales sobretodo en condiciones de abandono y calle. Una alumna los empezó a tratar y habló con nosotros como maestros. Nosotros ya habíamos tenido un problema de inseguridad que se metían a robar y ya se había visto lo de adoptar unos perros y pues ellos se quedaron, se empezó el tratamiento para que se curaran”.
Meses después, se sumó al “equipo guardián”, “Huesos”, rescatado de su antiguo hogar al que toda la comunidad escolar nombró así por sus condiciones en el momento de llegar al plantel.
“Tenían a “huesos” en condiciones de abandono, entonces lo sacaron de la casa con autorización y así llegó “huesos” aquí; Se llama así porque llegó en condiciones horribles de alimentación, flaquito y con anemia. También se empezó con su tratamiento para médico y todo, así es como llegan aquí. Con “Julieta” tenemos un año y con “huesos” desde el mes de noviembre, a finales de año”.
“Julieta” y “Huesos” cuidan el plantel todas las noches y por el día, suelen ser visitados por estudiantes y maestros quienes se encargan de su alimentación, salud y por supuesto, del cariño necesario para que sean felices, explicó Cristina Galullo docente que forma parte del equipo responsable de los caninos.
“Los animales no conviven muchos con los chicos porque ellos en el día están guardados por cuestiones de seguridad. Los perros están tranquilos, no son agresivos con quien está adentro de la universidad, con las personas que están afuera de la universidad si ladran mucho y no dejan que se acerquen al recinto. Ellos salen de noche y corren, juegan por todo el campus”.
A parte de coadyuvar en la seguridad del plantel, el adoptarlos como mascotas, tiene la finalidad de incentivar el respeto hacia los animales en los estudiantes y también, promover en otras instituciones educativas la adopción de perros y gatos en situación vulnerable.
“Educar a los chicos es lo que tiene que hacer una institución educativa, no solo dar contaduría, derecho, inglés, también valores y sobretodo en el cuidado de los animales que en Los Cabos es un problema enorme, y ojalá que otras escuelas puedan hacer lo que hicimos nosotros: Adoptar dos perritos, ¡mejor! porque uno se siente solo, dos es mejor”, concluyó.