El cortometraje de los directores de cine Alejandro Díaz y Andrés Ibáñez, que tardó cinco años en realizarse, retrata los problemas que hay detrás de una taza de café
CIUDAD DE MÉXICO.
Es tan cotidiano saborear una taza de café a cualquier hora que nadie se detiene a pensar qué hay detrás: el trabajo, problemas y disputas que existen en torno a este cultivo, que en tierras chiapanecas es la moneda de cambio.
Los directores de cine Alejandro Díaz y Andrés Ibáñez buscaron retratar esto en su documental A Six Dollar Cup of Coffee.
Nos gusta decir que es de denuncia pero también creo que aborda muchos temas. La complejidad que hay detrás del café, porque pareciera que hay buenos y malos, pero, la realidad es que son personas y cada quien está defendiendo sus intereses, su patrimonio. Que no se nos olvide que no solamente es un ingrediente gastronómico, sino también se ha convertido en esa región de Chiapas en la moneda de cambio”, comentó Díaz a Excélsior.
Puede ser una película de denuncia, pero también cuenta una historia que no es la que todo mundo le gustaría ver reflejada, pero que es la verdad, es lo que pasa, un grupo de gente que lucha por defender su tierra y su patrimonio”, intervinó Ibáñez.
La historia gira en torno a la familia Guzmán y la cooperativa Yomol A’tel, en Chilón, Chiapas, en el seno de la cultura indígena tzeltal, donde estuvieron trabajando a lo largo de cinco años, conviviendo con la gente del lugar.
A decir de los realizadores, lograron entrar a esta cultura gracias a la paciencia, que hizo que los indígenas dejaran que vieran y expusieran la problemática del café desde todos los ángulos.
La clave fue el tiempo y tener el tacto para saber cuándo sacar la cámara y cuando no. No fue un rodaje donde llegamos a hacer lo que sabemos, tuvimos que ir cinco veces a Chiapas y estar por largos periodos, pero tuvimos la suerte de participar en rituales mayas, fuimos partícipes junto con ellos de muchas situaciones, por ejemplo, cuando los japoneses les avisaron que ya no eran dueños de los restaurantes estadunidenses donde ellos comercializaban su café fue difícil, los acompañamos en bastantes etapas a lo largo de cinco años”, dijo Díaz.
El filme de 73 minutos se presenta hoy en el Festival Internacional de Cine en Guadalajara y a nivel comercial a principios de 2019; a las redes sociales llegará antes.
Lo que queremos es que haya debate, que la gente vea lo que hay detrás de una taza de café, que entiendan el valor que tiene que llegue hasta tu mesa, que cambie la visión que se tiene y que tomen la decisión de qué café quieren tomar”, explicó Ibáñez.
Los realizadores trabajan en otro documental que sigue la misma línea, aunque con otro producto: El aguacate.
Le cambió la cara a este estado y ahora presenta retos a nivel ecológico, de seguridad, hay un boom gastronómico y queremos una película que hable de ésto y de los retos que se vienen”, adelantó Díaz.