El padre de la víctima observar corrupción en las autoridades encargadas de procurar y administrar justicia, luego de 8 años sin lograr que los asesinos de su hijo estén en prisión
La Paz, Baja California Sur.- El 2 de febrero del 2010, Carlos Jesús Vega Andrade, en el cumplimiento de su función como elemento de la Policía Municipal, acudió a brindar apoyo en el reporte de un robo a casa habitación, sin embargo, su patrulla fue recibida a disparos.
Tras la agresión, Carlos Jesús Vega Andrade falleció por una serie de impactos de arma de fuego que recibió en la escena.
Desde esa fecha, Carlos Vega, padre del oficial caído, no ha dejado de exigir justicia para honrar la memoria de su hijo, sin embargo, a 8 años del asesinato del agente policiaco el crimen sigue impune.
La mañana de ayer, Carlos Vega acudió a las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), para entrevistarse con el titular, Daniel de la Rosa Anaya, sin embargo, no fue recibido por el funcionario.
El padre del oficial caído fue atendido por el secretario particular del procurador, confirmando, a través de dicha reunión que, el caso de su hijo sigue en las mismas condiciones de impunidad.
“Durante todos estos años que he estado viniendo a buscar justicia, el objetivo de estas personas es la ineficiencia y la insensibilidad hacia uno. No hay nada concreto”, compartió Carlos Vega.
El familiar de la víctima teme que no quieran resolver el caso de su hijo porque hay corrupción en las autoridades de la Procuraduría.
“Procuradores van y vienen y siempre dicen lo mismo, pero no veo en realidad la confianza en ellos. No hay confianza en las autoridades, ahorita es peor con este Nuevo Sistema de Justicia”, acusó Carlos Vega.
En un llamado a las autoridades del gobierno del Estado y a los ciudadanos, el padre del agente policiaco exhortó a que fueran empáticos con su dolor al no poder lograr aún justicia para su hijo.
“La impartición de justicia, creo, nunca la veré porque hay algo negro. Mi sentir es dolor, impotencia, rabia. Qué harían, en su momento, el gobernador, el procurador, los magistrados, todos los funcionarios, si les mataran un hijo ¿Se sentarían y darían vueltas perdiendo el tiempo en la Procuraduría como yo?”, dijo Carlos Vega.
“Ellos moverían hasta el mismo Ejército para dar con los asesinos. Pero yo, un pobre ciudadano común que llora y clama justicia por su hijo, tiene que esperar esto ¿Qué podemos esperar todos los ciudadanos?”, agregó Carlos Vega.
A 8 años, el doliente asegura que insistirá y no quitará el dedo del renglón hasta que haya justicia para su hijo.