”Nada trae el pitcher en la bola de nudillos” (del argot beisbolero), con esto quiero decir que en estas precampañas me da la impresión, percepción, que los principales candidatos (¿pre?) que acaban de concluir, se dará un inter, un impase, para iniciar las campañas formales el 30 de marzo; me refiero para el caso y tema a las precandidaturas donde casi todos se desviaron, descompusieron, tanto en sus discursos, comunicados, spots, declaraciones, en el principal objetivo de éstas: el de transmitir verdaderas propuestas, propósitos, su cabal honestidad, proyecto de nación “aunque sea sólo a sus militantes partidistas” (entrecomillé porque se van a todo público) CON EL DEBIDO SUSTENTO, SOPORTE, CAPACIDAD, preparación y conocimiento realista del tema o asunto, sin embargo sólo se han dedicado a ataques, contraataques y defensas  entre unos y otros, exhibirse con o sin pruebas fehacientes, a veces hasta con injurias, ofensas personales, sobre todo de parte de Ricardo Anaya del Frente PAN-PRD-M.C. contra Meade y del “terrible” Enrique Ochoa (en nombre de Meade) creando confusión y desconfianza no sólo entre ellos sino en lo más principal: al electorado, ya que ellos mismos le están llevando en algunos casos importantes LA DESINFORMACIÓN, todo por priorizar esta estrategia electoral, más allá muchas veces-otra no-de la verdad. De ahí que las empresas encuestadoras-no las partidistas que las hacen públicas-presentan, mayor porcentaje del voto indeciso, según sea la encuestadora y este fenómeno también se refleja en la lucha electoral para gobiernos estatales.

Así entonces, como en un deporte popular, la política tiene partidarios que celebran y aplauden cada jugada de su equipo, aunque sea mala, y detractores que abuchean y rechiflan todo lo que hace el equipo contrario, aunque sea bueno. Así está la situación por el encono partidario, de peleas.

Y en este panorama de sentimientos políticos que se leen, que se observan y que se escuchan en estos tiempos, muy probablemente estén provocados, repito, por el antipriismo en un extremo y por los antiamlopismo (más que antiMorena que contiene buenas candidaturas en diversos estados) en el otro, que al inicio de este sexenio representaban alrededor de un tercio del electorado: los antipriistas registraban 36 por ciento, mientras que los anti López Obrador representaban 32 por ciento. Pero hay otro aspecto más para visionar a los públicos opuestos, a esos que marcan esta férrea rivalidad con miras a las campañas; el que hay también amplios grupos que son anti-PRI y anti-AMLO; es decir, rechaza a los dos (de acuerdo a la encuesta consultada).

EXTRACTOS, FRAGMENTOS, DE EJEMPLOS DE LOS GOLPES DE CANDIDATOS OPONENTES

De una periodista: Ricardo Anaya, José Antonio Meade y Andrés Manuel López Obrador ya no deben ser leídos, calificados u opinados desde los frívolos parámetros de la mercadotecnia tradicional. Qué importa si son feos o bien parecidos, si tienen carisma o son aburridos o si sus spots están bien o mal logrados. Lo que debería estar a debate es lo que representa cada uno para las libertades, la paz y el crecimiento del país. Que Anaya, Meade o López Obrador sean de izquierda, centro o derecha es lo de menos. El riesgo no está en lo que dicen ser, sino en lo que realmente son.

DE REDES SOCIALES.-“Anaya y López Obrador son dos tiranuelos embozados. Sólo quieren sentarse en la silla presidencial para luego ser igual o peor que los más peores. Están vacíos, no tienen propuestas, lo que llaman proyecto de nación son meros golpes de propaganda para hacer crecer el voto del rencor. * López Obrador lo hace utilizando a los pobres. Anaya manipulando a una clase medida resentida y enojada. * Una periodista: ¿Que Meade carga con los negativos del PRI?, Sí, es cierto.  ¿Qué Meade viene de un gobierno contra el que hay enojo e indignación?, también es verdad.

Sin embargo, hay en todo esto algo paradójico: Meade, con todo y ser hombre del sistema, no es un tirano interesado en aplastar las instituciones para perpetuarse en el poder. No es un enemigo de la democracia. Y esto refrenda lo dicho por alguien: lo que va a estar en juego el 1 de julio no es una elección, sino el destino de una nación y sus libertades.

REDES SOCIALES.- En esta parte de la precampaña, José Antonio Meade trata de presentarse como un candidato desvinculado de un gobierno donde ocupó tres puestos claves en el gabinete. Desde la “Estafa Maestra” en Sedesol hasta el escándalo de triangulación de fondos de Hacienda hacia los estados durante las elecciones de 2016, la campaña de Meade está minada de escándalos de corrupción que lo involucran, al menos por omisión. * José Antonio Meade no es una imposición de Peña Nieto, ni es dedazo del PRI, es una designación directa de los centros financieros internacionales dirigidos desde Estados Unidos. Etc…

Y así, muchos más temas-dichos, todos estos candidatos los aprovechan dándole su propio giro y lenguaje (a excepción de Meade, que éste, más que devolver los golpes, los matiza y comenta como base a sus comunicados, que por ahora no impactan mucho, la verdad, que quizá ya como candidato oficial, sí se vaya más a fondo). Digo.

¿QUIÉN, CÓMO, Y POR QUÉ, SE DECIDIERON LAS CANDIDATURAS DEL PAN PRD-M.C. EN B.C.S.?

Hará poco más de un mes que aquí mismo escribí un tema que titulé: “B.C.S. y sus gobiernos para dónde se van a ir electoralmente en el 2018?, ¿Prian?”, que coincidentemente un colega (bien enterado) abordó un tema similar en estos términos: “Mendoza como otros 11 gobernadores del PAN, decidirá finalmente las candidaturas”. El problema de Carlos Mendoza es ahora lograr el mayor número de votos para la coalición PAN-PRD-MC en BCS, y sacar adelante las próximas candidaturas federales que van a depender muchos de él, ya que según trascendió los 12 gobernadores del PAN convinieron con su partido decidir los candidatos a las dos diputaciones y dos senadurías de mayoría.

Además, desde luego van ‘a palomear’ las nominaciones al Congreso local y los 5 ayuntamientos, y lidiar en todo caso, con la ‘posible reelección’ de algunos ediles y legisladores locales…”  (Riestra).

Pues bien, todo esto me perecía muy lógico, sobre todo siendo la primera elección de Carlos Mendoza como gobernador panista, sin embargo, me preguntan ¿Qué pasó, Dibeni?, ¿acaso Fco. Pelayo, Eda Palacios, Arturo de la Rosa, Marco Puppo, más los del PRD y MC. ¿son mendocistas?, o… covarrubistas (pero Marcos con qué amarre de alto nivel?, ¿o sí lo tiene con Margarita y/o con Ricardo Anaya?, digo yo) o de plano Anaya se enceló políticamente de Meade, y vetó por ser Carlos-y no negarlo-muy amigo de su opositor José Antonio, como candidato del PRI…? (por más que éste, el gobernador, siempre aclaró públicamente, que su política esta con su partido el PAN. Buenos días.