• El jugador de Tigres espera que lo sucedido sirva para que otras personas se den cuenta que la pirotecnia no deja nada bueno.
Monterrey, Nuevo León.- “Me
tocó aprender por las malas”, fue así como Jürgen Damm resumió el accidente que
sufrió el lunes, cuando encendía fuegos pirotécnicos en su casa y uno de los
cohetes explotó cerca de su rostro dejándole quemaduras de primer grado.
El jugador fue llevado de
inmediato a un hospital de la zona Valle Oriente en San Pedro para ser atendido
y una vez fuera de peligro, a través de las redes sociales expresó lo que vivió
e invitó a no utilizar este tipo de artefactos.
“Quiero agradecer a Dios
porque fue un verdadero milagro que esto no haya pasado a mayores. Ojalá lo que
me pasó a mi les sirva a todos ustedes para que aprendamos que la pirotecnia no
deja nada bueno en nuestras vidas. Tristemente me tocó aprender por las malas,
pero en verdad deseo que esto les sirva de mensaje para que no tengan que pasar
por algo así. Gracias a todos los que me han manifestado su apoyo, me han
ayudado bastante en estos momentos difíciles”, expresó por medio de un mensaje.
Se tiene pronosticado que Damm
tardará por lo menos dos semanas para poder recuperarse, por lo que se perderá
los primeros dos compromisos de Tigres en el Clausura 2018.