La Paz, Baja California Sur.-  Margarita Palma Salazar, presidenta de la Asociación de Mujeres Indígenas Ita Yuku de Baja California Sur (BCS), comentó para Diario El Independiente que actualmente se encuentran tocando puertas para realizar el proyecto "La Casa de la Mujer Indígena" donde se buscará ofrecer un espacio a las mujeres de regiones mixtecas, zapotecas y de otras entidades que vienen a Sudcalifornia a trabajar en los campos agrícolas o en la ciudad. 

"Somos una asociación que se dedica a defender los derechos de la mujer indígena y su empoderamiento, estamos buscando oportunidades para realizar esta casa de la mujer indígena para que las mujeres que lleguen de fuera, encuentren un lugar donde se identifiquen y se les pueda apoyar" agregó Palma Salazar.

"Las mujeres que vienen de la región, no hablan español, y por lo tanto se les complica conseguir trabajo o a veces el trabajo donde llegan a laborar son explotadas, hay muchos casos en la labor del campo, mucha gente como nosotros viven esa situación ", puntualizó la presidenta.

Margarita Palma aclaró que la asociación está constituida legalmente y que pertenecen alrededor de 60 mujeres afiliadas de distintas regiones, donde 5 de ellas forman parte de la mesa directiva, recalcando que la creación de esta casa es para tener un espacio seguro  donde logren acogerse mientras se les ayuda a buscar un empleo digno y mejores posibilidades.

Palma Salazar, indicó que se han logrado ciertas vinculaciones con algunas instancias de gobierno, tales como la Comisión Nacional para el desarrollo de los pueblos Indígenas (CDI) quien las coordina para la elaboración del proyecto, recibiendo de igual forma apoyo del Instituto Municipal de Las Mujeres (IMMujeres), explicando que la inexperiencia burocrática no les permite avanzar con la Casa de la Mujer Indígena.

"Creemos que por la falta de experiencia para elaborar proyectos ha sido una causa por la que no se ha logrado, nos piden muchos requisitos y aunque los teníamos todos, el haber puesto a una persona de gobierno como acompañante, eso eliminó la posibilidad de seguir en su momento, pese a que todo estaba listo", explicó. 

Ante las dificultades la asociación no quita el dedo del renglón para concretar el proyecto y proporcionar el apoyo adecuado a estas mujeres, pues Palma Salazar asegura que a pesar de que existen talleres de autoestima para la mujer, la mujer indígena requiere otro tipo de apoyo, muchas veces hablado en mixteco, o bien que se comunique con ellas de otra manera para que puedan comprender sus derechos.

"Enseñarles qué es el autoestima, sus derechos, porque hay que entender que ellas vienen con otras culturas arraigadas en sus usos y costumbres", dijo la presidenta de la asociación, por lo cual, hizo un llamado a las autoridades que fomentan este tipo de talleres, para que realicen las adecuaciones necesarias o de alguna forma, usar de traductoras a las integrantes que hablen tanto el idioma requerido como el español.  

Finalmente, la presidencia de Grupo Mujeres Indígenas invita a la población indígena a integrarse ya sea para apoyar o vincularse con las tradiciones que aún se conservan en estas mujeres, por lo cual pueden presentarse en la Calle 2, esquina tercera en la colonia Agua Escondida.