Integrantes de la XIV legislatura local aprobaron el presupuesto solicitado por el gobierno del estado para el ya muy próximo 2018. Dicho presupuesto será de 16 mil 415 millones de pesos. La mayor parte destinado para atender los rubros de salud y educación, el 47%.
Parece una cantidad muy grande para
aplicarla a estos dos rubros. Sin embargo, Baja California Sur es un estado en constante
crecimiento, no por natalidad, sino por la ininterrumpida migración de compatriotas
y de extranjeros que se están viniendo
al estado a radicar temporal o permanentemente. Si en sus entidades o países de
origen no encuentran los satisfactores a sus necesidades primarias de vivienda,
salud, educación y trabajo, salen de ellas en busca de mejores estadios de vida
para ellos(as) y sus familias.
A pesar del ambiente de inseguridad y violencia que de unos años para
acá está viviéndose en nuestra entidad, la verdad es que la necesidad tiene
cara de hereje. Prefieren arriesgarse a enfrentar estos peligros que a sufrir más penalidades
y carencias en donde residen, Para ellos BCS es una esperanza. Pero lamentablemente con estas personas que
vienen en busca de un mejor futuro también llegan muchas otras que buscan esconderse, porque donde viven han cometido
delitos menores y mayores por lo que están siendo perseguidos por la policía de los tres niveles y hasta por el
crimen organizado…
Pero toda esta población migrante
ve las condiciones de vida de la
población sudcaliforniana, un nivel de muy buena calidad si lo comparamos con
otros estados y hasta con otras naciones
y empiezan a exigirle a los
gobiernos de estado y municipales, que atiendan sus demandas de
vivienda, salud, educación y trabajo. Y estos migrantes, al ver mejorado su nivel de vida y atendidas más
o menos satisfactoriamente sus demandas, empiezan a traerse a sus parientes,
compadres y amistades que andan en problemas iguales o similares a los que ellos
estaban afrontando…
Al pagar
las instancias oficiales de los tres niveles de gobierno en la entidad,
que depende casi totalmente de ellas, habrá movimiento de dinero, que vendrá a
dar un respiro a la población, aunque la bonanza sea breve. Pero hay que tratar
de aprovecharla lo mejor posible y si se
puede guardar algo para enfrentar la cuesta de enero, que sentimos que dura una
eternidad.…
Para todas (os) los lectores
de este su diario, para toda la familia
de “El Independiente”, para todas
nuestras amistades, para toda la población sudcaliforniana, mexicana y la humanidad entera, lo mejor para esta
Navidad. Necesitamos mucha fe en Dios para curar nuestras heridas, físicas y del alma… Hasta la semana
próxima, Dios mediante.