Que tienen alguna discapacidad que va de severa a menor. Los y las jóvenes podrán recibir, a partir de enero próximo, 500 pesos mensuales. Buena ayuda para las y los estudiantes y sus familiares. Pero surge la pregunta ¿Qué factores provocan el que en Baja California Sur, en sus zonas rurales, haya tanos jóvenes con discapacidades, muchas de ellas severas? ¿Factores genéticos, por tantas uniones de consanguíneos que se viene dando desde hace siglos, debido a su aislamiento? Habrá que estar pendientes de lo que informan al respecto las autoridades sanitarias. Porque seis mil personas con discapacidades severas o menores, para esas comunidades con tan poca densidad de población es un número muy elevado.

Pero en las zonas rurales de nuestro estado siempre ha habido esta problemática. El aislamiento, más por falta de vías de comunicación en buen estado y no su lejanía geográfica, provoca problemas de toda índole, sobre todo, las relaciones sexuales entre familiares, algunos muy cercanos, que traen como consecuencia embarazos y obvio nacimientos, de seres humanos con discapacidades. A lo largo de los años se han ido comunicando muchas de estas regiones rurales, se les ha dado orientación y atención médica, pero también al crecer las familias, sus miembros más jóvenes han buscado nuevos asentamientos y el problema sigue aumentando. No es nada sencillo de resolver. Faltan recursos económicos y humanos, además de hace conciencia en las y los habitantes de estas zonas para que comprendan el peligro que corren y acepten evitar estas relaciones entre familiares.

Algo difícil, porque desgraciadamente y aunque no queramos, con el paso del tiempo estas se consideran parte de sus “usos y costumbres”. Cuando por segunda ocasión el Gral. Agustín Olachea Avilés, gobernó el territorio de Baja California Sur, solicitó a la presidencia de la república y a la SEDENA, que enviarán un batallón más al territorio. Entre sus razones, además de la vigilancia, era que hubiera una importante derrama económica por los haberes de los militares, que esos si llegan puntualmente, en zonas alejadas de la media península. La otra razón, era que precisamente por enviarse a soldados y oficiales más o menos jóvenes, estos buscarían mujeres en las zonas a donde los mandaran, habría nacimientos y una buena inyección de sangre nueva en Baja California Sur. No hay duda que el Gral. Agustín Olachea fue un visionario para su época… Hasta la semana que entra, Dios mediante.