Desde niña y hasta la actualidad, a sus 35 años, se dedica a trabajar en la obra porque al no estar registrada le es difícil acceder a mejores empleos. Es madre de cinco hijas, la mayor de 19 y abuela de dos nietos; a todos los mantiene
San José del Cabo, Baja California Sur.- Cargar escombros, hacer mezcla, acarrear material, limpiar y realizar detalles, entre otras cosas, son parte de las actividades que en la obra, a diario, realiza Irma López, ciudadana de San José del Cabo, quien “desde que tiene memoria” y hasta la fecha, a sus 35 años cumplidos el pasado 24 de diciembre, trabaja en este oficio.
“Soy originaria de Nayarit, pero tengo 32 años viviendo en Los Cabos, gracias a Dios en la obra me va muy bien, pero no puedo obtener un negocio más formal porque no tengo papeles ya que nunca fui registrada y por lo tanto, no tengo acta de nacimiento, ni credencial y dos de mis cinco hijas están en las mismas condiciones, por eso mi mayor regalo de cumpleaños, de Navidad y Año Nuevo, sin duda es que me ayuden a registrarme”, compartió con Diario El Independiente.
Si bien el trabajar en la obra inició y continúa siendo una necesidad para mantener a sus hijas y a sus dos nietos, no le es suficiente como para poder rentar o hacerse de una casa en donde puedan habitar, motivo por el que viven todos juntos en el vado de Santa Rosa.
“No puedo pagar una renta porque si no me alcanza […] no me da miedo vivir en el arroyo, me da miedo quedarme sin trabajo y no poder ayudar a mis hijas, a quienes no podré darles ningún regalo en estos festejos, pero nos conformamos con pasarla juntas, pero insisto, mi mejor regalo sería poder registrarme yo y mi hijas”, expuso.
Luego de barrer y recibir por unos segundos la visita de su hija mayor de 19 años y su nieto más pequeño que apenas pasa el año de edad, lanzó un mensaje para todas aquellas mujeres que estén en situación vulnerable, “todo se puede mujeres, échenle ganas, no hay ningún trabajo exclusivo para hombres, todo se puede y más cuando hay la razón de los hijos”, concluyó.