La aplicación promueve la gratitud a través de mensajes de apoyo y solidaridad, que llegan a los destinatarios vía electrónica y con forma de diploma
MADRID.
Como un abrazo a la distancia, la aplicación "100thanks" promueve un valor tan importante como es la gratitud a través de mensajes de solidaridad que llegan vía electrónica al destinatario en la forma de un diploma.
La iniciativa busca sumar agradecimientos, que recorran mucha distancia a través del mundo, y generen un cambio positivo.
El joven español José Luis Cáceres, que resultó afectado por la crisis económica, decidió transformar su difícil situación en un proyecto tecnológico, así creó la aplicación (app) "100thanks", para agradecer todo lo que aprendió en ese proceso.
En la actualidad México es el segundo país, después de España, que más actividad tiene en esa plataforma, que funciona sin fines de lucro.
Al respecto, su creador enfatizó que "sabemos que México es un país donde la gratitud es muy importante. Lo sabemos por los mensajes que llegan desde ahí o por la interacción que tiene, y nos encantaría promover el movimiento más a fondo en México".
Sobre los desastres que provocaron los sismos ocurridos en septiembre pasado en territorio mexicano, Cáceres anotó que "es curioso que la gente valora la gratitud cuando le pasan cosas graves en sus vidas como en México, donde justamente después de lo que pasó con el terremoto la gente se unió más".
En entrevista con Notimex, Cáceres señaló que "quise escribir lo que había aprendido en el cambio y transformarlo en algo positivo, y de ahí la idea de "100thanks", cien cosas aprendidas, cien cosas por las que dar gracias".
Luego, con las personas con las que él trabaja, desarrolló una plataforma que se convirtió hace unas semanas en una aplicación, con la cual los usuarios pueden enviar mensajes de agradecimiento.
Es muy sencillo, explicó: "pones la dirección electrónica de a quien quieres agradecer algo, le llega un diploma con el mensaje; ubicas el sitio donde vive esa persona, y hay un mapa del mundo que se va construyendo y va recorriendo una cadena, acumulando kilómetros" de agradecimiento, de solidaridad.
Cáceres resaltó que el proyecto es sin ánimo de lucro "porque nos dimos cuenta que si queríamos algo de él perdía su magia; lo empezamos así, y gracias a Dios lo conseguimos mantener por un equipo de personas que han decidido hacer su aportación al mundo con lo que saben hacer, promoverlo".
Contó que hace dos años y medio no estaba muy consciente de la importancia que tiene el agradecimiento, "porque pensamos que agradecer es simplemente por educación, decir gracias".
Sin embargo, cuando la gratitud tiene realmente valor y es súper potente "es cuando pensamos qué afortunados somos por lo que agradecemos, ahí es cuando uno empieza a sentir, uno empieza a ser más feliz, y empieza a cambiar muchas cosas alrededor de la vida de uno", indicó.
Para Cáceres "100thanks es probablemente la cosa más mágica que he hecho en mi vida, porque nace de querer agradecer a los que están alderredor mío, pero después hemos sido portada de uno de los periódicos más vistos en Estados Unidos, de que nos invitaran al parlamento británico, que diéramos charlas junto a diversos embajadores en diversos países", narró.
El proyecto convertido en app logró que Sarria, España, que es el sitio donde todo el mundo inicia su andadura en el Camino de Santiago, se ubique como la capital mundial del agradecimiento, gracias a Iván Quiñoá, quien vive allí y es embajador del proyecto.
Quiñoá conoció a Cáceres por medio de un amigo sin que éste conociera su historia, ya que en 1995 le diagnosticaron un "Sarcoma de Ewing", un cáncer raro, muy avanzado, con un pronóstico inicial de vivir tan sólo tres meses y que logró vencer con una increíble historia de gratitud.
En la entrevista con Notimex, expuso que "la gratitud para mí es poner en valor las pequeñas cosas, bonitas, que pasan cada día".
"No es necesario tener un caso límite, o un ejemplo límite como puedo ser yo por un cáncer terminal que tuve hace 20 años, y ahora estoy curado, y no es necesario pasar por un proceso tan duro para agradecer esas cosas bonitas que te pasan cada día", dijo.
Recalcó que la plataforma "100thanks" fue una conexión maravillosa para él, ya que a partir de que Cáceres conoció su historia y su libro "¡Quiero vivir!. Un enfermo terminal/vital", se le ocurrió que él fuera embajador para transmitir la gratitud en todo el mundo.
Al hacer un repaso de su historia, puntualizó que "los médicos se aventuraron a pronosticarme tres meses de vida en 1995 y desde el primer momento dije que no quería formar parte de las estadísticas, que estaba en contra de eso y era muy consciente del proceso, que tenía que luchar, pero conecté con esas ganas de vivir y con una actitud de vida".
Añadió que "fue una técnica mental, pero unida también a una actitud y una alegría de vida, y por supuesto a un agradecimiento por la vida".
"Al final la plataforma '100thanks' es una extensión del abrazo, y si no te puedo abrazar porque estás en México, pues te envío un diploma y con eso pongo en valor nuestra amistad o esa deuda que tengo contigo de agradecimiento", subrayó.