La Paz, Baja California Sur.- El asesinato del titular de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), Silvestre de la Toba Camacho, ocurrido sobre la principal avenida de la Capital del Estado, es el primero de un ombudsman en funciones en México. 

De la Toba Camacho, quien fue asesinado junto con su familia frente a una de las principales plazas comerciales de La Paz, era uno de los 32 ombudsman estatales, parte del sistema nacional de derechos humanos, que a la fecha no había registrado ningún asesinato de alguno de sus titulares.

De todos ellos, únicamente el de Oaxaca, Arturo Peimbert Calvo, fue parte de titulares en semanas recientes luego de ser agredido durante una visita a una comunidad del estado, presuntamente por personas inconformes con su labor. 

A diferencia de esto último, el asesinato de De la Toba Camacho ocurrió sin previo aviso y sin que el propio ombusman hubiese denunciado actos de intimidación o amenazas contra su vida producto de su trabajo.

Al ombudsman sudcaliforniano y a sus 31 colegas, el relator especial de Naciones Unidas sobre la situación de los defensores de derechos humanos, Michel Forst, les había pedido a principios de este año que aumentaran el apoyo a los defensores que suelen ser las víctimas comunes en México y en el mundo, como por ejemplo, los que están en contra de proyectos y los ambientalistas. 

Chiapas, Oaxaca, Guerrero, la Ciudad de México y Chihuahua son los lugares donde la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos ha documentado asesinatos de activistas y defensores, pero en ninguno de los casos, de comisionados estatales. 

El asesinato de De la Toba Camacho y su familia ocurrió en medio de un clima de inseguridad en el estado que se ha cobrado desde el pasado sábado más de una decena de muertes en La Paz. 

En la serie de recomendaciones que emitió la CEDH este año se destacan una contra una institución escolar, y dos contra policías en La Paz y Mulegé  y por irregularidades encontradas en centros de rehabilitación.